La Dirección General de Tráfico (DGT) puso en funcionamiento las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) este 2023, con el objetivo de contribuir al sostenimiento del Cambio Climático. Con ellas, llegaron las famosas etiquetas o distintivos medioambientales, que sirven para identificar el nivel de emisiones emitidas por los motores de cada vehículo y que se pegan en la parte inferior derecha de la luna. Es decir, básicamente, indican cuánto contaminan. Algo que sirve para establecer las restricciones de circulación y por dónde no podrán circular.
Con ese objetivo de reducir el impacto medioambiental de la contaminación de los vehículos, todas las poblaciones con más de 50.000 habitantes tendrán obligatoriamente que establecer una zona de bajas emisiones. También se incluyen los territorios insulares y aquellos municipios con más de 20.000 habitantes que superen los niveles de contaminación permitidos. Algunos ayuntamientos, de hecho, tienen la potestad de establecer el pago de un peaje urbano para circular por la zona.
Ordenados de menor a mayor intensidad, existen cuatro tipos de etiquetas: 0 emisiones, etiqueta eco y distintivo C y B. Esto significa que solo podrán circular por las zonas de bajas emisiones los tres primeros. En España, todavía el 75% de los vehículos son de combustión. Aunque los que tengan etiqueta C solo podrán aparcar y no circular. Únicamente los ‘cero emisiones’ o los ecológicos dispondrán de total libertad de circulación
La etiqueta D, un bulo
De color naranja y con la letra D. Perfectamente diseñada con los estándares de Tráfico respecto al resto de distintivos medioambientales. Fue la imagen que comenzó a circular con el comienzo de año y la llegada del ZBE y que hacía entender que la DGT instauraría un nuevo distintivo por la vuelta a niveles de contaminación prepandemia tras el levantamiento total de las restricciones sanitarias impuestas por la pandemia de la COVID-19. Sobre todo, en las grandes ciudades.
Esta estaría dirigida a aquellos vehículos con un alto kilometraje. Concretamente, por encima de los 200.000 kilómetros. “Menudos hijos del mal. Si el vehículo pasa la ITV, debería poder circular”, “lo peor es que la gente no protesta” u “otro abuso más”, se pudo leer en las respuestas del hashtag de ‘etiqueta D’ de redes sociales como Twitter o Facebook.
Pero como ha confirmado Tráfico, se trata de ‘fake news’ (noticias falsas) o un bulo que probablemente surgió el pasado 28 de diciembre, en torno a las clásicas bromas que se realizan el Día de los Santos Inocentes, y que acabó por extenderse merced al boca a boca efervescente de las redes sociales. Los únicos distintivos, entonces, continúan siendo los cuatro expuestos anteriormente:
- Etiqueta 0 emisiones.
- Etiqueta eco.
- Etiqueta C y B
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