Un hombre que cobró más de 150.000 euros en prestaciones de la Seguridad Social en Castellammare di Stabia, en la región de Campania (Italia), ha sido detenido junto a su esposa por estafar miles de euros en ayudas públicas por invalidez. La administración italiana estaba pagando a este hombre por padecer una ceguera total cuando en realidad lo que tenía era visión parcial, según la agencia de noticias Ansa.
La Policía que se encarga de los delitos financieros en este país, la Guardia di Finanza, ha explicado que este hombre (del que no se ha revelado su edad ni su identidad) empezó a fingir que era completamente ciego a principios del año 2000. Como se demostró más tarde, no era así, y aunque es cierto que tenía una visión parcial, podía realizar con normalidad tareas del día a día.
El año pasado, la Policía ya se puso sobre la pista y comenzó a sospechar de esta pareja cuando se les realizó un embargo de 125.000 euros. Entonces abrieron una investigación en la que comprobaron cómo el hombre se desplazaba sin ayuda, pagaba las compras en efectivo y podía sacar dinero en los cajeros automáticos sin problemas. Precisamente mientras estaba sacando dinero, le grabaron las cámaras de videovigilancia y sirvió como prueba para los agentes que de este modo se dieron cuenta de que llevaba años fingiendo.
Al verlas, un perito forense y un oculista determinaron que el comportamiento que estaba teniendo este supuesto ciego era “incompatible con el de una persona que no tiene visión alguna”, como declararon en un reportaje en el Corriere del Mezzogiorno.
La Seguridad Social le declaró ‘ciego absoluto’ en 2010
La Seguridad Social italiana, por medio de sus peritos, le diagnosticaron ceguera absoluta en el año 2010. Nunca se había puesto en cuestión este resultado, y el hombre había cobrado durante más de 20 años la prestación que le correspondía.
Ahora, el matrimonio se enfrenta a un fraude agravado ya que han estado recibiendo ayudas públicas. Consta en el expediente que se han falsificado documentos oficiales y que se ha engañado a los profesionales médicos.
Los dos están bajo arresto domiciliario mientras el procedimiento judicial sigue su curso. Según la agencia de noticias italiana, podría extenderse hasta finales del mes de noviembre.
Este caso ha reabierto en Italia el debate sobre el control en el sistema de prestaciones por discapacidad o incapacidad permanente y ya han anunciado que el INSPS (Instituto Nacional de la Seguridad Social en el país alpino) va a revisar los expedientes de invalidez tramitados en la región de Nápoles en los últimos años.