Elma Saiz celebra que las jubilaciones demoradas se hayan duplicado: es una “excelente noticia”

Retrasar la edad de jubilación fue uno de los principales objetivos que recogió la reforma de las pensiones y sigue siendo un punto de especial interés para el Gobierno. Así pues, no es de extrañar que la ministra de la Seguridad Social, Elma Saiz, haya destacado este lunes que el número de jubilaciones demoradas voluntarias se haya duplicado en los últimos años, a la par que las jubilaciones anticipadas han retrocedido casi 10 puntos solo en los últimos 5 años, situando la edad media de jubilación por encima de los 65 años. 

“Es una excelente noticia”, celebró Saiz en la clausura de las jornadas ‘Fututo Sénior: Generación Z y Boomers, una alianza necesaria’, donde defendió la jubilación voluntaria demorada como una fórmula para aumentar la sostenibilidad del sistema de pensiones, transmitir conocimiento ‘sénior’ y combatir el edadismo. 

Al respecto, ha señalado que “España no se puede permitir el lujo de desperdiciar talento sénior”, expresando que se debe “premiar esa permanencia de talento en el mercado de trabajo porque nos beneficia a todos”. Sobre esta permanencia en el mercado de trabajo, ha defendido que “es evidente que hay personas que quieren seguir trabajando más allá de la edad ordinaria de jubilación”, por lo que se deben encontrar fórmulas “para que cada uno lo haga según sus circunstancias”, detallando que “la clave es, precisamente, eso, la flexibilidad, que haya más opciones”. 

Cabe recordar que actualmente la ministra se encuentra negociando con los agentes sociales (patronal y sindicatos) la forma de mejorar la compatibilidad entre trabajo y pensión, algo que se puede conseguir actualmente mediante la jubilación parcial, la jubilación flexible y la jubilación activa. 

En este sentido, añadía que “hay que favorecer una salida progresiva del mercado de trabajo y evitar que se salga prematuramente de él, porque nuestra sociedad no puede permitirse el lujo de desaprovechar el talento de los más veteranos, y las fórmulas de jubilación activa y flexible son perfectas para esta transmisión de conocimiento y de sabiduría y, además, reforzar el equilibrio financiero del sistema y mejorar la calidad de vida de las personas”.

“No todos los trabajos son iguales”

Al mismo tiempo, Elma Saiz ha reconocido que “ni todas las personas ni todos los trabajos son iguales”, existiendo profesiones más “duras” donde las personas buscan jubilarse antes y que el sistema también debe tenerlo en cuenta, teniendo que “proteger” a estos trabajadores. Por ello, también están trabajando con los agentes sociales la posibilidad de implantar unos nuevos coeficientes reductores en la edad jubilación para las actividades penosas.