El precio de los alquileres continúa su senda imparable de estratosférico ascenso, mientras la Ley de la Vivienda quema sus últimas etapas para entrar en vigor y el Gobierno apuesta por la vivienda social. Los últimos datos a los que ha tenido acceso y ha publicado ‘Idealista’ evidencian que el coste de los contratos de arrendamiento volvieron a romper las marcas históricas que ya se habían establecido en marzo.
La del aumento en bucle de la cantidad a pagar para vivir de alquiler es la tónica general, como ocurre con el euríbor, del último año. Actualmente, las rentas ya han subido un 8,9% si se compara con el mismo mes del año pasado, hasta 11,5 euros por metro cuadrado. Un encarecimiento que está provocando que muchas personas, más allá de los estudiantes, se vean obligados a compartir piso.
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¿Dónde es más caro vivir de alquiler en España?
Málaga (con incrementos del 24,4%), Palma de Mallorca (21,2%), Alicante (20%), Valencia (20,6%) o Barcelona (18,7%) son las ciudades donde más ha subido el coste del alquiler comparado con abril del año 2022.
Mientras que Barcelona (18,6 euros el metro cuadrado), Madrid (16,4 euros el metro cuadrado), San Sebastián (15,9 euros el metro cuadrado), Palma de Mallorca (14 euros/metro cuadrado) y Las Palmas (12,6 euros/metro cuadrado) encabezan el ranking de las más caras.
‘Obligados’ a compartir vivienda
La problemática cobra aún mayor relevancia si se tiene en cuenta que los precios de los alquileres nunca habían sido tan caros en España desde 2008, durante el estallido de la última gran crisis financiera e inmobiliaria, provocada por la explosión de las ‘hipotecas subprime’ (a un precio fuera de mercado).
Un panorama que guarda ciertas similitudes con el actual, con la crisis del coronavirus, la guerra en Ucrania y la inflación, generando un contexto económico adverso, entorpeciendo el acceso a una vivienda ante el desigual incremento de los salarios y la dificultad, por otro lado, para acceder a una hipoteca por los costes iniciales y el alza del euríbor.
La única salida para los más afectados está siendo la de compartir piso. No solo los estudiantes o trabajadores jóvenes -algo habitual-, sino también, y cada vez más, personas de más de 30 años, a las que su comprometida situación económica no les deja otra salida.
Sin embargo, alquilar una vivienda compartida también es más caro que hace un año, según datos de ‘Pisos.com’. Lo es un 10,17%, exactamente, después de que la renta media de alquiler nacional ascendiera de los 348,13 euros de marzo de 2022 a los 383,54 euros del mismo mes de 2023. Barcelona (579 euros al mes), seguida de Madrid (499 euros) y Vitoria (445 euros), continúan siendo las más caras.
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