La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, adelantaba tras el Consejo de Ministros que el BOE de este 3 de septiembre publicaría las normas para la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2026. Y efectivamente, en el Boletín Oficial del Estado aparece este miércoles la Orden HAC/974/2025, el primer paso para conseguir que estas cuentas públicas salgan adelante. Ahora, el Gobierno deberá contar con el respaldo de la mayoría del Congreso de los Diputados para hacerlos realidad, aunque en caso de que no sea así, se continuará con los que ya hay y Pedro Sánchez no convocará elecciones.
Aunque hasta que la orden ministerial no ha aparecido en el documento oficial no se comenzará a trabajar, sí se han estado viendo movimientos entre ministerios. Montero confirmó que durante los meses previos “se han mantenido contactos de manera informal para conocer las necesidades y los nuevos proyectos que se quieren alumbrar con estas cuentas públicas”.
Redistribución de la riqueza, mejores servicios públicos y atención a personas vulnerables
Las líneas transversales de los Presupuestos Generales del Estado, como ha señalado la ministra de Hacienda, pretenden conseguir un mayor desarrollo económico, así como la redistribución de la riqueza, mejores servicios públicos y atención a las poblaciones vulnerables especialmente a los jóvenes, cubriendo políticas clave como el acceso a la vivienda.
De este modo, confirma la intención del Gobierno de Sánchez de contar con unos Presupuestos en 2026. Una postura que ya defendió antes de verano cuando aseguró que “rotundamente sí” se presentarían estos PGE. “Los vamos a presentar con apoyos o sin ellos pero esto es un instrumento y es más importante lo que está promoviendo este Gobierno con las cuentas prorrogadas”.
Y es que este es uno de los bastiones que está aprovechando la oposición para atacar al Gobierno de coalición. En este sentido, la ministra ha resaltado la importancia de que compartan estas nuevas cuentas. “Estoy convencida de que va a ser así, otra cuestión diferente es que se usan estos instrumentos para solicitar cosas que a veces son ajenas al mismo”.
Ya se están manteniendo contactos con otros grupos, aunque en este sentido, prefiere ser discreta. “Eso permite que cada uno pueda desarrollar las reuniones sin una presión añadida que hace imposible el acuerdo”.