Una mujer logra jubilarse a los 58 años y con una pensión de 1,437,67 euros después de que la Seguridad Social se la denegara por negar efectos retroactivos a su discapacidad
La Seguridad Social le denegó la pensión al no aplicar con carácter retroactivo los coeficientes reductores por discapacidad que sufría desde niña. El tribunal corrige y reconoce su derecho al 100% de la pensión.

