El padre lo desheredó alegando falta de relación familiar, la justicia considera que él no era el culpable del poco contacto y condena a su hermano a devolverle su parte legítima de la herencia.
La justicia considera que en casos de indivisión ningún heredero tiene derecho a usar el bien en exclusiva, ya que esto perjudica los intereses del resto.
Desheredó a su hija por romper la relación tras su nuevo matrimonio pero la justicia considera que tiene derecho a la herencia porque la culpa no era exclusivamente suya.
El tribunal considera que la falta de relación era solo imputable a los nietos y el Código Civil Catalán prevé esta como una de las causas de desheredación.
A través de un sobre en la puerta de su casa le comunicaron que había recibido en herencia una mansión de la época victoriana que ha terminado siendo el escenario de una película premiada.
Uno de los sobrinos denunció alegando que su tía no estaba en condiciones mentales y que debía mantenerse el testamento anterior en el que él salía más favorecido.
Tras una denuncia de un familiar lejano y el hospital donde había sido ingresada, piden la nulidad del testamento y acusan a la notaria de falsedad documental.
La justicia valida el testamento de la anciana considerando que no existen pruebas de incapacidad en el momento de otorgarlo y que se debe respetar su voluntad.
Este hombre dejó a su pueblo una herencia con un patrimonio millonario con la condición de que se dedicase a fomentar el estudio y la cultura en la localidad.
El Tribunal considera que la falta de relación entre padre e hija no era imputable a ella y que este, en testamentos previos, había reflejado no tener descendencia.
La justicia ha dado la razón a Hacienda y la hija ha sido obligada a pagar la deuda que había heredado de su padre pese a que alegaba que la misma estaba prescrita.
Con esta decisión la justicia considera que mientras no se resuelva el reparto de la herencia el patrimonio que se recibe puede cambiar y, por tanto, el importe del impuesto.
Para el empresario es importante que sus hijos sepan ganar dinero por sí mismos y no quiere que crean que tienen la vida resulta por ser ‘hijos de’.
Tras heredar la vivienda, el heredero encontró cerca de 5.000 piezas, entre monedas y lingotes de oro, por un valor de 3,7 millones por las que deberá pagar el impuesto de sucesiones.
Los familiares del fallecido consideraban que la exmujer no tenía que heredar porque ya estaban divorciados y que ellos debían ser los beneficiarios de la herencia.