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Una mujer de 92 años se niega a vender su casa al campo de golf Masters que gastó 200 millones de dólares en expandirse: "El dinero no lo es todo"

La vivienda es del año 1956 y la empresa que va a expandir el campo de golf paga por ella miles de dólares, pero la propietaria no quiere venderla.


Casa de la mujer
Una mujer de 92 años se niega a vender su casa al campo de golf Masters que gastó 200 millones de dólares en expandirse: "El dinero no lo es todo" |Envato
Berta F. Quintanilla
Fecha de actualización:

Una mujer de 92 años, que tiene una casa situada a pocos metros de un enorme campo de golf, no quiere venderla a la empresa que se va a encargar de la expansión de este área deportiva. El Augusta National Golf Club ha hecho varias ofertas a Elizabeth Thacker que la jubilada ha rechazado argumentando que lleva instalada en esa casa más de 60 años y que todos sus hijos se han criado allí. 

La primera de las ofertas fue de 215.000 dólares estadounidenses, que al cambio son 189.052 euros. La casa tiene una sola planta en la que hay tres habitaciones y está en un terreno de 2.711 metros cuadrados (0,67 acres). Construida en 1956, está en perfecto estado y con el tiempo, se ha revalorizado por encontrarse muy cerca del campo de Augusta National Golf Club.

Como explicó la familia Thacker al diario Fortune, la vivienda está en el número 1112 de Stanley Road, y precisamente en esa casa es donde ha crecido su nieto Scott Brown que se dedica al golf de manera profesional. 

Las autoridades del Augusta se mostraron desde el primer momento receptivas a pagar mucho más del valor de tasación de la casa, que ha llegado hasta los 338.026 dólares (297.231 euros) en 2024 según marca el registro de la propiedad al que ha tenido acceso Redfin. Una cantidad muy elevada que Elizabeth y su familia han rechazado.

“El dinero no lo es todo”

Jugadores del Master Augusta de Golf. | EFE

Thacker ha mantenido la negativa a vender la casa durante años, a pesar de que como reconoce su hija Robin, las presiones han sido constantes. “Todavía somos los propietarios y mi madre sigue viviendo allí”, ha dicho la hija de Elizabeth a Fox Business, indicando que “ella es muy decidida”.

A pesar de que la mujer de 92 años ha dicho que ‘no’ en varias ocasiones a pesar de la enorme presión social que supone la celebración del torneo Augusta National, sigue las indicaciones que le dio su marido, ya fallecido. Él señalaba que “el dinero no lo es todo” y su familia ahora usa esa frase como bandera en cada entrevista periodística. 

La expansión del campo de golf da como resultado ofertas millonarias

Casa donde vive la mujer de 92 años. | Yahoo news.

La expansión del campo de golf Augusta está dejando mucho dinero a aquellas personas que sí han decidido vender sus propiedades. Según un reportaje que publicó el Wall Street Journal (WSJ), citado por Fortune desde hace 20 años la empresa que gestiona este área deportiva ha estado usando ‘empresas pantalla’ invirtiendo 20 millones de dólares.

Gracias a esto, el campo ha crecido un 75%, transformando por completo la zona en la que se encuentra en un residencial. Esto deja mucho dinero cuando llegan los torneos más importantes, ya que lo que más se ha hecho han sido zonas residenciales y aparcamientos.

La familia ya vendió otra casa por 1,2 millones de dólares

La historia de la familia Thacker con la constructora del campo de golf no es nueva. Ya vendieron otra de sus propiedades por 1,2 millones de euros. Ahora, esta no era su vivienda habitual, ya que siempre ha permanecido fuera del alcance del club.

Una vecina, que vivía apenas a 11 minutos andando del campo de golf, sí vendió su casa por 1,1 millones de dólares. Lo que ha cambiado es el entorno de la vivienda, dejando de ser el verde idílico que la rodeada por convertirse en un terreno que servirá como zona de aparcamiento a los asistentes a los torneos. 

Se espera que en pocos días miles de personas acudan a la celebración de Masters de Augusta, el torneo de golf más importante del mundo donde acudieron los más grandes coo Arnold Palmer, Tiger Woods o Jack Nicklaus.

La casa de Thacker es una excepción, explican los protagonistas a los medios locales, ya que está en perfecto estado. “Normalmente, lo que se compra son viviendas antiguas, semiderruidas”. 

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