La Dirección General de Tráfico (DGT) ha optado por reforzar las normas sobre dónde y cómo está permitido dormir o pasar la noche dentro de nuestro coche. Porque a veces, y ante la falta de planificación a la hora de viajar o hacer escapadas, muchas personas eligen hacerlo en coche. Después de todos los preparativos, hay quienes no tienen en cuenta un detalle muy importante: el alojamiento. Y, esto es un problema, pues el organismo vial puede multarnos con hasta 600 euros en los casos más graves.
Claro que acondicionar un coche para descansar unas horas se ha convertido en una práctica cada vez más habitual. Pero, ¿es realmente legal? La Dirección General de Tráfico tiene claro que sí, aunque no en todos los casos.
Dormir en el coche es legal, aunque no en todos los casos
La ambigüedad legal reside en la diferencia entre "acampar" y "pernoctar". Mientras la pernoctación se refiere simplemente a pasar la noche dentro de un vehículo estacionado, la acampada implica la instalación de elementos externos como tiendas, mesas, sillas o toldos. Esta distinción es clave para comprender las sanciones.
Según informa la institución vial, es posible dormir en el interior del coche. Eso sí, debe estar bien estacionado, no sobrepasar las marcas viales de un aparcamiento ni incumplir la normativa de tiempo. Por lo tanto, hacerlo no supone una infracción como tal.
Es fundamental que se encuentre aparcado sin obstaculizar el tráfico, el paso de peatones o las vías de emergencia, como caminos forestales, ya que esto podría acarrear multas. Sin embargo, existe alguna que otra excepción.
Aquí es donde aparece un detalle muy claro: toda actividad que se haga en el interior del coche no se podrá llevar al exterior. O lo que es lo mismo; no se puede sacar fuera ningún objeto que amplíe el espacio que el propio coche ocupa. Esta actividad está regulada por normativas locales que varían según el municipio, y muchas zonas protegidas o espacios naturales tienen prohibiciones expresas.
La diferencia entre ‘pernoctar’ o ‘acampar’ en el coche puede costarnos sanciones de entre 60 y 600 euros, según la DGT
Como señala la Instrucción 08/V-74 del Reglamento General de Circulación, “basta con que la actividad que pueda desarrollarse en su interior no trascienda al exterior mediante el despliegue de elementos que desborden el perímetro del vehículo tales como tenderetes, toldos, dispositivos de nivelación, soportes de estabilización, etc".
Así, mientras que el vehículo esté bien aparcado, no se sobrepasen las marcas viales y no se despliegue en el exterior ningún elemento, no hay ningún problema. La DGT ha establecido multas que van desde los 60 hasta los 600 euros para quienes acampen fuera de las zonas habilitadas. La medida tiene como objetivo preservar espacios naturales y mantener el orden en destinos especialmente frecuentados por este tipo de viajeros.
Basta con aparcarlo en un lugar seguro y adecuado sin desplegar elementos añadidos como toldos
De hecho, el Real Automóvil Club de España (RACE) también alerta sobre las consecuencias de no cumplir con estas normativas. Porque aunque muchos conductores piensan que con tener el seguro al día e ITV vigente es suficiente, y pueden aparcar y dormir donde quieran, lo cierto es que hacerlo en zonas prohibidas puede costar caro, como vemos.
Ahora, si lo único que queremos hacer es dormir en el coche, permaneciendo en su interior, sin ocupar más espacio o hacer ruido, basta con aparcarlo en un lugar adecuado y seguro. De lo contrario, la multa estará asegurada.
No obstante, la normativa contempla algunas excepciones. Entre ellas, si una persona utiliza su vehículo como residencia habitual y está reconocida como vulnerable por los Servicios Sociales, las autoridades pueden considerar este hecho como eximente a la hora de aplicar la multa. Esta medida busca evitar que quienes viven en situación precaria sean penalizados injustamente.
De todas formas, la DGT insiste en la importancia de que los conductores que viajan en caravana, autocaravana o furgoneta se informen previamente sobre las normativas municipales y las zonas habilitadas para este tipo de prácticas. Lo que en un municipio está permitido puede estar completamente prohibido unos kilómetros más adelante.
