En los últimos años, ha crecido la preocupación por el auge de la inteligencia artificial y su impacto en el empleo. No en vano, un informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo reveló que más de 8 millones de empleos podrían perderse antes de 2033 en España. Un riesgo que también se corre con los sistemas automatizados, como son las ya asentadas cajas automáticas, que se pueden encontrar tanto en supermercados como en multinacionales.
Sobre esto se manifestó hace un tiempo Ana Milán, la famosa actriz y presentadora de 52 años, durante el podcast ‘La vida tal’, que mantenía anteriormente con Sebastián Gallego. Ahora, un usuario de TikTok ha querido recuperar ese mensaje, que sin duda sigue en plena actualidad: “Atentos a estas palabras de Ana Milán que todos los trabajadores deberían aplaudir”.
Las palabras en cuestión de Ana Milán eran las siguientes: “En ningún caso paso por las cajas sin cajero. Yo no conozco ninguna máquina que cotice a la Seguridad Social. ¿Queréis que tengamos jubilación? Pues vamos a educar un poquito a los Zara, a los Inditex estos que les gustan tanto las cajas automáticas”.
Así de contundente se mostraba, añadiendo que ella por ahí no iba a pasar: “Que no, las máquinas no cotizan a la Seguridad Social. Son empresas que están ganando un porrón de dinero, que me parece muy bien: olé tú, Amancio y olé tú, Marta, pero necesitamos pensiones, aparte de máquinas en los hospitales, necesitamos pensiones”, concluía.
“Si los empleos desaparecen por la automatización, menos dinero llega al sistema. Y las pensiones futuras se ven amenazadas”
Antonio, el joven que ha recuperado este discurso en TikTok, ha querido exponer en el mismo vídeo su postura, defendiendo cada una de las palabras de Ana Milán, poniendo como contexto que, según el INE, el 30% de los trabajos en comercios podrían automatizarse en los próximos años, lo que significa menos aportación al sistema de pensiones.
“En España, el sistema público de pensiones depende de las cotizaciones de los trabajadores activos. Si los empleos desaparecen por la automatización, menos dinero llega al sistema. Y las pensiones futuras se ven amenazadas. Por eso tiene razón. Elegir un cajero humano no es solo solidaridad, es proteger un sistema que todos necesitamos, que esto también refleja una resistencia frente a las decisiones empresariales que priorizan las ganancias frente a las personas”, manifiesta.
El joven reivindica que “pequeñas acciones de solidaridad ayudan a defender empleos y pensiones”, algo que “nos afecta a todos”. Por esta razón, concluye que “nuestras acciones, aunque sean pequeñas, pueden apoyar a quienes sostienen la sociedad día a día”.
