Una mujer gana más de 9,5 millones de euros en la lotería, lo gasta en lujos y unos años más tarde no puede llegar a fin de mes

Ganar la lotería es el sueño de muchos para dejar de tener problemas económicos. Pero recibir un premio millonario no siempre es la solución a los problemas, y es que aprender a administrarlo es algo fundamental. Una lección que ha aprendido muy bien una mujer que, después de ganar un premio de más de 9,5 millones de euros en la lotería, algunos años después tiene que trabajar a tiempo parcial porque no llega a fin de mes.  

Según la información publicada en el medio británico ‘The Sun’, esta mujer ganó uno de los premios mayores de la lotería de su país, Canadá. Gracias al sorteo se embolsó más de 9,5 millones de euros que no le han durado ni 10 años.  

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Esta mujer siempre había llevado una vida humilde, vivía de alquiler con sus tres hijos y no podía permitirse comprar un coche, por lo que el premio le cambió radicalmente la vida. Tras ganar el premio compró una casa, se casó y tuvo tres hijos más, pero, el no saber administrar el dinero del premio, la ha vuelto a hacer tener problemas para llegar a fin de mes.  

Confiesa haber gastado gran parte del dinero en lujos y ahora tiene que trabajar para llegar a fin de mes 

En una entrevista en un medio local, la mujer confiesa que "el dinero es la raíz de todos los males”. Según la información publicada en el medio británico, la mujer gastó casi todo su dinero en viajes de lujo, coches de alta gana y ropa de marca, aunque también compartió parte del premio con sus familiares y amigos.  

Se casó con su marido y tuvieron tres hijos más, haciendo un total de 6. La nueva familia numerosa se trasladó a una nueva casa con más espacio, y compró varios coches. Entre ellos algunos de marcas tan conocidas, y caras como Hummer, Mustang o un Cadillac tuneado.  

Aunque la mujer explicó que no todo fue derroche, ya que compartió parte del premio con sus padres y hermanos, ayudó a varios amigos a montar un negocio e incluso compró varias viviendas para ponerlas en alquiler asequible.  

Esta falta de previsión al administrar el dinero hizo que la pareja comenzase a tener problemas económicos, y cuando la mujer se quiso dar cuenta ya solo le quedaban en el banco unos 700.000 euros.  

En uno de los medios locales en los que fue entrevistada explicó que “no crees que desaparecerá alguna vez”, pero el dinero se fue gastando. Algo que agravó cuando su marido fue acusado de conducir bajo los efectos del alcohol con uno de los coches caros que habían comprado, le quitaron el carnet de conducir y fue condenado a 18 meses de prisión.  

Durante el tiempo que su marido estuvo en la cárcel perdieron la casa familiar, y se vio obligada a vivir de alquiler junto a sus hijos, volviendo al punto de partida de tener que llevar una vida humilde como siempre había hecho antes de ganar el premio.  

La mujer confiesa que, pese a todo, lleva una vida feliz, y que prefiere llevar una vida “normal”, algo que espera poder transmitir a sus hijos para que puedan disfrutar de tener una vida sin lujos.