La pensión de jubilación de los funcionarios supera en más de 1.100 euros a la del resto de jubilados

Según los últimos datos publicados por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, liderado por Elma Sáiz, la pensión media de los funcionarios pertenecientes a las Clases Pasivas fue un 80% superior a la del resto de funcionarios del sistema. Esto supuso un gasto total para el sistema de 14.300 millones de euros, si se incluyen los asalariados del Régimen General, autónomos y el resto de regímenes de la Seguridad Social.

Las últimas estadísticas de la Seguridad Social muestran que los jubilados que anteriormente fueron funcionarios públicos de las Clases Pasivas cobran una pensión media de 2.614 euros al mes, para un total de 445.000 pensionistas, lo que supuso un gasto de 1.164 millones de euros en mayo de 2024.

En cambio, la pensión media de jubilación del resto del sistema (que engloba todos los regímenes de la Seguridad Social) percibida por un total de 6,6 millones de pensionistas fue de 1.441,50 euros. Esto supone una diferencia de 1.173 euros al mes o 16.422 euros al año. Si comparamos las pensiones de jubilación por regímenes, vemos que la diferencia puede variar.

En el caso de los jubilados del Régimen General (donde se encuentra la mayoría de los trabajadores por cuenta ajena o asalariados), esta se sitúa en 1.600,99 euros, lo que supone una diferencia de 1.013,01 euros. Esto cambia si lo comparamos con la pensión de los trabajadores autónomos (los que cotizan en el RETA), cuya pensión media se situó en 962,35 euros, generando una diferencia de 1.651,65 euros al mes. De hecho, los jubilados por cuenta propia son los que menos pensión cobran.

Altas pensiones, pero que llega a su fin

Aunque actualmente hay 45.000 pensionistas en las Clases Pasivas, representando un 1,5% del PIB (Producto Interior Bruto), lo cierto es que este sistema desaparecerá con los años. Esto se debe a una medida del gobierno que integra a las Clases Pasivas del Estado en la Seguridad Social, algo que ya se contemplaba al estructurar los departamentos ministeriales.

Según el Real Decreto-Ley 13/2010, todos los funcionarios que comenzaron a trabajar para el Estado a partir del 1 de enero de 2011 forman parte del Régimen General de la Seguridad Social. Las cuentas del gobierno indican que en 2050 las Clases Pasivas representarán solo el 0,8% del PIB y que esta proporción seguirá disminuyendo con el tiempo.

Los pensionistas que conforman las Clases Pasivas son:

• Funcionarios de carrera de la Administración del Estado.
• Personal militar profesional, incluyendo las Escalas de Complemento y Reserva Naval.
• Miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, como policías y guardias civiles.
• Funcionarios de carrera de la Administración de Justicia y de las Cortes Generales.
• Funcionarios de carrera de otros órganos constitucionales o estatales, según su legislación.
• Funcionarios en prácticas y alumnos de Academias y Escuelas Militares a partir de ciertos rangos.
• Ex presidentes, vicepresidentes y ministros del Gobierno de la Nación.
• Personal que ha cumplido el servicio militar o una prestación social sustitutoria del servicio militar obligatorio.

¿Por qué las pensiones de los funcionarios son más altas que el resto de trabajadores?

La principal razón por la que los jubilados de las Clases Pasivas tienen una pensión más alta que el resto de asalariados es porque cotizan por una base de cotización más elevada, dado que sus sueldos son mayores. Esto hace que, al aplicar el método de cálculo de la Seguridad Social, la pensión resultante sea más elevada, ya que es muy raro que sus cotizaciones se vean reducidas.

Esto contrasta con los trabajadores autónomos, donde el 86,6% cotizan por la base mínima. Debido a esta baja cotización, su pensión media apenas alcanza los 1.000 euros.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2022, el salario medio de los trabajadores del sector público fue de 2.835 euros mensuales, siendo el dato más reciente disponible. Este salario es aproximadamente un 45% superior al salario medio del sector privado, que se situó en 1.958 euros al mes.

Además, el sector público tiene un salario más elevado porque la mayoría de sus trabajadores cuentan con estudios superiores, ocupan puestos más cualificados, trabajan a tiempo completo y tienen más antigüedad en sus empleos. Esto contribuye a que sus salarios sean superiores.