El aumento de gasto en pensiones propone una jubilación en la que te despiden sin indemnización

España tiene un sistema de población de pirámide invertida donde cada vez hay más jubilados que nacidos. Esto está preocupando especialmente a los expertos de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), quienes en su último estudio recién publicado advierten del “preocupante” gasto en pensiones que sufre cada mes el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, bajo las directrices de Elma Saiz. Como propuestas han lazando un nuevo modelo de jubilación en la que se proponen retrasar el acceso a esta pensión contributiva.

A pesar de los recientes esfuerzos de dicha administración, como el endurecimiento en las penalizaciones para acceder a la jubilación anticipada, el alargamiento de la edad de jubilación hasta 2027, el destope de las bases máximas de cotización y la subida de las cotizaciones; parece ser que esto no es suficiente para sostener el sistema actual. Es más, desde la fundación advierten que “se ha aumentado aún más el gasto que el ingreso”.

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— Fedea (@socialfedea) February 12, 2024

Otra advertencia viene de parte de la jubilación activa, es decir, este tipo que permite compatibilizar el cobro de la pensión con el desarrollo de una actividad laboral (pero sin que sea retribuido). Como explica el escrito, no es que haya supuesto un gran cambio en la legislación.

La propuesta de Fedea para mejorar la jubilación activa en 2024

Una de las principales propuestas pasa por introducir una jubilación flexible y compatible con el trabajo. Como expone el texto: "una vez alcanzada la edad normal de jubilación, el sistema debe permitir, si así lo desea el trabajador, la oportunidad de compatibilizar pensión y salario".

Además, propone unificar todas las modalidades de jubilación en una sola desde la primera edad posible de jubilación anticipada, es decir, a los 61 o a los 63 años, siempre que el internado tenga derecho al retiro a los 65 años al demostrar el periodo mínimo de cotización exigible para cada año.

Así, esa jubilación activa debe incorporar:

• Pensión compatible con el trabajo en todas las edades.
• Sin penalización sobre el montante de la pensión después de la edad normal de jubilación, y con penalización dependiente del nivel salarial, salud o penosidad del empleo, antes de la edad normal de jubilación.
• Al objeto de evitar cualquier forma de discriminación, la nueva jubilación activa no debería excluir a ningún trabajador, siempre que cuente con un mínimo de años cotizados y con el derecho a alguna forma de jubilación.
• Eliminación de la obligación de pasar un año por la jubilación demorada (o la inactividad) para acceder a la jubilación activa a todas las edades.
• Posibilidad de seguir en el mismo trabajo a tiempo parcial con cualquier porcentaje de jornada.

Impulsar un nuevo contrato sin indemnización por despido

En el documento es posible comprobar cómo la última propuesta de este organismo pasa por crear un nuevo contrato laboral que sea compatible con la pensión, para tener derecho a la jubilación activa, pero en el que no se incluya ninguna indemnización por despido.

Específicamente, “el objetivo es que el jubilado activo pueda trabajar, a tiempo completo o parcial, en la misma o distinta empresa, por cuenta ajena o propia, sin topes máximos de retribución. La pensión sería plenamente compatible con cualquier salario”.

El ‘pero’ viene al añadir que “ya que tienen la seguridad de su pensión, deben cotizar en un régimen especial, sin costes indemnizatorios para la empresa contratante”. Se podría establecer un periodo de trámites previos para ambas partes, contratante y contratado, “para romper libremente la relación contractual en caso de desistimiento”.