Este hombre casi pierde la jubilación anticipada por un solo día de cotización

Llegar a cierta edad dentro del mercado laboral y quedar desempleado es en muchas ocasiones una auténtica faena. No siempre es posible cobrar el paro o el subsidio para mayores de 52 años del SEPE, lo que pone a la jubilación anticipada como la única vía de escape hacia la falta de ingresos. Sin embargo, hay situaciones que dejan a las personas al filo de la pensión, como la historia de este jubilado al que le faltaba un día cotizado.

Es la historia de Manel, un vecino de Barcelona de 64 años que por una leve irregularidad vio peligrar la prejubilación ante sus ojos. Estando desempleado y sin derecho a cobrar la prestación contributiva por desempleo (el paro) ni ningún subsidio del SEPE, solicitó la jubilación anticipada siguiendo las indicaciones de la Seguridad Social. 

El problema se agravó cuando, por la lentitud de la administración pública, casi se queda sin poder prejubilarse a falta de solo un día cotizado. En ese momento, él era profesor de un colegio de Badalona y, ante la desesperación, acudió a la radio para hacer un llamamiento de auxilio.

El retraso en los trámites provocan una prejubilación ficticia

A pesar de que aún no tenía los 65 años, la edad ordinaria de jubilación, comenzó a informarse sobre todos los pasos que debía dar: accedió al simulador de la jubilación habilitado en la Sede Electrónica de la administración, acudió a una oficina de la Seguridad Social donde le confirmaron que podría prejubilarse desde el 17 de octubre de 2022… Entonces, ¿qué ocurrió?

Después de esa visita, recibió un email donde le notificaron que, a partir del citado día y cuando estuviera disponible, podía responder a ese correo electrónico y solicitar la jubilación anticipada. 

En su intento por no perder la jubilación, Manel quiso explicar mediante una llamada telefónica a la radio Rac1 para explicar que siguió trabajando en el colegio, avisó a la dirección y el 22 de diciembre reclamó la baja laboral por jubilación. “Ese día se supone que yo estoy jubilado. Las escuelas cierran por Navidad y pienso que el proceso de jubilación ya está en marcha”, apunta el maestro.

La sorpresa llega el día de la Víspera de Reyes Magos, el 5 de enero de 2023, cuando recibe un email del Instituto Nacional de la Seguridad Social informándole de que le deniegan la pensión contributiva. Ante el estupor, recibe una notificación donde le explican que tenía entonces 63 años cuando pidió la prestación y no tenía la edad para acogerse a la jubilación porque le faltaba un día más trabajado.

¿Cuántos días hay que trabajar para cobrar la jubilación anticipada?

La resolución del organismo público muestra cómo Manel tenía 12.716 días cotizados, pero a ojos de la administración, son necesarios haber trabajado 12.717 días, como exige la normativa legal. Sin embargo, esa no es la información que recibió de los funcionarios en su visita de consulta, los mismos que no supieron darle respuesta a qué debía hacer en ese momento.

“No entiendo nada. He dejado el trabajo de forma gratuita, sin nada. No tengo nada”; explicó en la radio. “Si me contratan un día, tampoco sé si me sirve para la jubilación porque podrían pedirme luego más cosas. No tengo derecho al paro ni a ningún tipo de prestación porque me he marchado yo de forma voluntaria de mi puesto”, explicaba en la radio Manel.

Ante esa surrealista situación, llegó hasta sumar el tiempo pasado en el servicio militar para ver si así podía engordar su vida laboral. Al acudir a este medio con su grito de auxilio, el profesor recibió una llamada del director provincial de la Seguridad Social en Barcelona y le comunicó que se resolvería la situación.

Así, en este mes de abril, el protagonista ha cobrado el dinero de su primera pensión de jubilación anticipada más el dinero que le debían con carácter retroactivo. Un total de 9.500 euros.