El Gobierno extenderá las reducciones por rendimientos del trabajo en el IRPF para aquellos con rentas que no superen los 21.000 euros. El salario medio, según Hacienda. Una medida que contempla en el paquete fiscal dentro del pan contra la crisis energética y la inflación y que conlleva dos consecuencias fiscales inmediatas. La primera, elevar desde los 14.000 hasta los 15.000 euros el mínimo exento de tributación.
La segunda, tal y como explica el propio Ministerio de Hacienda, que "el alargamiento de los umbrales para la aplicación de la reducción por obtención de rendimientos del trabajo", que ahora alcanza los 21.000 euros brutos anuales, "obliga a ampliar el umbral de rendimientos a los que resulta aplicable el límite de la cuota de retención previsto".
De esta manera, sube a 35.200 euros el importe total de retribución prevista para la fijación del límite tope de la cuota de retención de rendimientos del trabajo, tal y como contempla el borrador del Real Decreto que ha pasado a la valoración de la audiencia pública. Un movimiento de precaución por parte del Fisco, que responde a limitarlas, y que no haya retenciones de mayor calibre.
El artículo 85 de la normativa del impuesto
La elección de esa cifra no responde al azar, sino ese punto concreto de la regulación de los rendimientos del trabajo. El siguiente escalón en la tabla a los 20.200 euros con los que se quedaría desfasada con este cambio, serían los 35.200 euros. Hacienda explica que el cambio es técnico, "para evitar errores de salto que se producen cuando desparece la reducción por rendimiento del trabajo".
El objetivo es "impedir que una subida de la renta implique un incremento muy superior del tipo de retención". Aunque recalcan “en ningún caso estamos ante una rebaja fiscal mayor de la que se anunció en su momento. El cambio propuesto en el reglamento persigue evitar los errores de salto que se produce en un tramo específico y para situaciones familiares concretas".
Reducción tributaria en la práctica para rentas de hasta 35.200 euros brutos
Ellos serán los principales beneficiados. Sobre todo en 2023, cuando estos trabajadores tendrán menos retención. “Al no poder acceder a la rebaja del impuesto, los contribuyentes que oscilen entre los 21.000 y los 35.200 euros tendrán que regularizar la reducción de retenciones de 2023 en la declaración de la renta que se realice un ejercicio después”, explica ‘El País’.
La cuota de retención, según lo que adelantó ‘Voz Pópuli’: "tendrá como límite máximo el resultado de aplicar el porcentaje del 43 por ciento a la diferencia positiva entre el importe de la cuantía total de retribución y el que corresponda, según su situación, de los mínimos excluidos de retención previstos". La retención para un salario bruto de 22.001 euros se situará en 1.186,57", añade el ministerio.
El Ministerio de Hacienda y Función Pública, que puntualiza que la modificación no supondrá una rebaja fiscal mayor que la actual al afectar únicamente a 250.000 contribuyentes (el 1,2% de los declarantes del IRPF), se encargó de ejemplificarlo personalmente con dos ejemplos de trabajadores en distintas situaciones:
- Sin hijos con un salario de 18.000 euros al año se ahorraría 746 euros en IRPF.
- Casado, con dos hijos y una retribución anual de 19.000 euros en declaración conjunta, se ahorraría 331 euros.
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