La ralentización económica empieza a hacerse notar entre los trabajadores por cuenta propia. Uno de cada tres autónomos (un 33%) asegura que su negocio ha descendido en el tercer trimestre de 2025 respecto al mismo periodo del año anterior, cuando la proporción fue del 25%, según el último Barómetro de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA).
El informe apunta a un empeoramiento de las expectativas: solo el 17% prevé un crecimiento de su actividad en el último trimestre del año, frente al 25,3% que lo esperaba en 2024. Casi la mitad (48%) cree que su situación se mantendrá estable y uno de cada cuatro teme que empeore.
Los costes disparan los precios y reducen márgenes
La subida de los gastos continúa siendo una de las principales preocupaciones del colectivo. El 77,5% de los autónomos asegura que sus costes han aumentado en el último año y el 65,1% reconoce haber tenido que repercutirlos en los precios finales. Aun así, un 31,2% afirma haber absorbido el encarecimiento para mantener tarifas, aunque más de la mitad (52,1%) prevé subir precios antes de final de año si la situación no cambia.
ATA recuerda que esta tendencia se mantiene desde 2024, cuando el 72,3% de los encuestados ya advertía un incremento de sus gastos operativos.
A pesar de la pérdida de dinamismo, la mayoría de los autónomos con empleados (53% del total) mantiene estable su plantilla. El 64,4% no ha hecho ajustes, mientras que un 16,6% ha reducido personal y un 19% lo ha incrementado.
Para los próximos meses, el 73,3% confía en mantener a sus trabajadores, un 13,5% espera contratar más y solo un 7,3% teme despidos.
El presidente de ATA, Lorenzo Amor, advirtió durante la presentación del estudio que sectores como la hostelería, la construcción, el transporte y la agricultura afrontan dificultades crecientes para encontrar mano de obra, especialmente en las campañas agrícolas, donde “la mayoría de los trabajadores son contingentes inmigrantes”.
Inestabilidad política y presión fiscal
Más allá de los costes, la federación alerta del impacto del contexto político. El 94% de los autónomos percibe una situación de inestabilidad, ya sea nacional o internacional, y el 90% considera que afecta directamente a su negocio o a la economía en general. Además, el 83,5% señala los impuestos como un obstáculo relevante, seguido del pago de seguros sociales (82,7%) y del coste de alquileres e hipotecas (37,8%).
En materia de financiación, solo el 30,2% ha solicitado crédito bancario, una cifra ligeramente inferior a la del año pasado. Entre quienes no lo han hecho, una cuarta parte reconoce que no puede asumir más endeudamiento.
ATA advierte de que la morosidad continúa al alza: afecta al 45,3% de los autónomos, un incremento respecto al 41,3% de 2024. En la mayoría de los casos (25,6%) proviene de empresas privadas, aunque un 12,8% la sufre tanto de entidades públicas como privadas. La organización considera que esta falta de pago, unida al aumento de cargas administrativas (que el 89,7% percibe como mayores que hace tres años), limita la viabilidad de miles de pequeños negocios.
