La Seguridad Social confirma qué enfermedad aumenta tus posibilidades de cobrar la incapacidad permanente

Padecer una enfermedad, sea común o profesional, puede dificultar seriamente en la capacidad de trabajo de cualquier persona. Cuando se ven afectados por una y reúnen las condiciones, la Seguridad Social puede llegar a concederles una pensión contributiva, para contrarrestar la pérdida de ingresos al dejar de trabajar. En esta situación, muchos trabajadores buscan conocer: ¿Cuál es la enfermedad por la que la Seguridad Social concede más pensiones de incapacidad permanente?

Actualmente, desde el Instituto Nacional de la Seguridad Social no existe una lista de enfermedades que permiten una incapacidad permanente que sea oficial. Lo que sí es posible consultar, es un listado de cuáles son las dolencias con el que el Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI), el tribunal médico, concede la pensión. Tras los exámenes pertinentes, la persona debe mostrar un grado de minusvalía igual o superior al 33%.

Cabe mencionar que la dolencia debe ser muy grave desde primeras para que ese tribunal médico conceda a simple vista una incapacidad. Lo más habitual es que el trabajador primero esté de baja médica y cobre una incapacidad temporal por el tiempo máximo de un año para después solicitar la pensión. Además, hay que tener en cuenta que en cada caso, llega a ser la Justicia la que determina que cierta enfermedad es motivo para cobrar la incapacidad permanente.

¿Cuál es la enfermedad frecuente con la que es más fácil conseguir una incapacidad permanente?

Tras un análisis exhaustivo de los 945.539 pensionistas que cobran esta pensión, la enfermedad que con más frecuencia deriva en una incapacidad permanente es la artrosis. Así lo han confirmado en RTVE desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Sobre todo en la llegada del otoño y el invierno, cuando la humedad y el frío se convierten en los peores aliados para sobrellevarla en ciertos trabajos.

El cobro de esta pensión no siempre inhabilita para cualquier trabajo, sino solo en la profesión habitual, por ejemplo, un barrendero o profesional de la construcción que trabajen en exteriores en climas fríos. Es por eso que la incapacidad puede ser de modalidad total, es decir, que no trabaja en el puesto que ocupaba hasta ese momento, sino que puede compatibilidad la pensión con otro trabajo.

En los casos más avanzados se les otorgará la incapacidad absoluta o incluso el complemento de Gran invalidez, aunque sea del tipo que sea, el EVI le otorgará siempre al trabajador una discapacidad del 33%.

¿Qué grado de discapacidad tiene la artrosis? 

Tal y como apuntan desde Bufete Toro, “el grado de artrosis de rodilla puede ir de un 7% a un 50%, aunque debe tenerse en cuenta si esta enfermedad afecta a los desplazamientos o no”, ya que el grado podría elevarse. 

Cada dos años, el tribunal médico de la Seguridad Social llamará al beneficiario de esta ayuda contributiva para comprobar cuál es el estado de la persona. Una cita que suele ocurrir cada dos años.