No todas las solicitudes de incapacidad permanente terminan con una resolución favorable para el solicitante, a pesar de que no sea él ni siguiera quien haya enviado la solicitud. En una sentencia reciente emitida por el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) se ha desestimado la solicitud de incapacidad permanente absoluta presentada por un vendedor de loterías afectado por una enfermedad diverticular y múltiples intervenciones quirúrgicas.
Según los magistrados, las limitaciones del demandante, que necesita ir al baño cada dos horas, no justifica una incapacidad que le impida realizar cualquier actividad profesional y menos con un alto grado de discapacidad, como recoge la sentencia por Infobae.
Los motivos que han llevado al vendedor de loterías a su situación
El vendedor de loterías ha sido sometido a varias intervenciones quirúrgicas debido a una enfermedad diverticular (pequeñas bolsas o sacos que sobresalen a través de puntos débiles en la pared del colon). En febrero de 2022, se le realizó una sigmoidectomía laparoscópica para tratar la diverticulitis. Sin embargo, tras complicaciones postoperatorias, en marzo de 2022 fue necesaria una nueva intervención, realizando una colostomía terminal a causa de una peritonitis.
En octubre de 2022, se efectuó una cirugía de reconstrucción para cerrar la colostomía, con una evolución favorable, según el seguimiento médico del Hospital Universitario San Agustín. A pesar de la mejora clínica, el demandante ha continuado reportando síntomas residuales como astenia, deposiciones frecuentes, urgencia ocasional y tenesmo, los cuales impactan su vida diaria y su capacidad laboral.
¿Por qué la Justicia rechaza el cobro de la incapacidad permanente?
El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) denegó inicialmente la solicitud de incapacidad permanente absoluta, argumentando que las limitaciones del trabajador no eran suficientes para calificarlo como incapacitado de manera permanente. Esta decisión fue confirmada por un juzgado de instancia, que desestimó la demanda presentada por el afectado.
El TSJA, al evaluar el recurso de suplicación interpuesto por el trabajador, ha ratificado la sentencia del juzgado de instancia. Los magistrados han explicado que la incapacidad permanente absoluta se define como aquella que incapacita al trabajador para toda profesión u oficio.
En este caso, el tribunal ha concluido que las limitaciones del demandante no son incompatibles con el desempeño de cualquier actividad profesional, sino solo con aquellas que impiden el acceso a un aseo en momentos específicos. Dado que la profesión de vendedor de loterías no se encuentra entre estas, no procede el reconocimiento de la incapacidad permanente absoluta.
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