Los hipotecados que cumplan estos requisitos pueden ahorrarse casi 3.000 euros en la declaración Renta

La compra de una vivienda es una de las mayores inversiones que afrontan las familias en España y en la mayoría de casas se recurre a las hipotecas para financiarla. En estos casos los gastos mensuales de las mismas son significativos y algunos hipotecados pueden encontrar un alivio económico aplicando ciertas deducciones en su declaración de la Renta, que puede llegar a superar los 2.700 euros. 

Hay que aclarar que no todos los hipotecados tienen derecho a la aplicación de dichas deducciones por la hipoteca en el IRPF, para ello las hipotecas tendrán que estar formalizadas antes del año 2013. Únicamente las anteriores a dicha fecha podrán beneficiarse de dicha deducción en vivienda habitual. 

Para ello tendrán que cumplir ciertas condiciones según lo que establece la Agencia Tributaria. Los titulares que lo hagan podrán disfrutar de dichas ventajas fiscales que en algunos casos llegan a los 2.712 euros.

¿En qué consiste esta deducción y qué requisitos hay que cumplir?

Según expertos del portal Help My Cash, esta deducción se traduce en un máximo del 15% del importe destinado al pago de la hipoteca durante el año, siempre que no supere una base anual de 9.040 euros. Esto significa que el ahorro máximo posible es de 1.356 euros.

Si la hipoteca tiene dos titulares que declaren de manera independiente, el ahorro se multiplica, pudiendo alcanzar los mencionados 2.712 euros anuales.

Ahora bien, para poder desgravar la hipoteca en la declaración de la renta, hay que cumplir ciertos requisitos que se detallan a continuación: 

• Fecha de formalización: La vivienda debe haberse adquirido y la hipoteca firmada antes del 1 de enero de 2013, fecha en la que esta deducción dejó de aplicarse a nuevos contratos.
• Declaraciones previas: Es obligatorio que el contribuyente haya aplicado esta deducción en alguna declaración anterior al ejercicio fiscal de 2012.
• Vivienda habitual: La deducción solo se aplica si la vivienda hipotecada constituye la residencia principal y permanente del titular.

Cómo aplicar la deducción en la declaración de la Renta 

Si se cumplen los requisitos anteriores, se podrá tener acceso a dicha bonificación fiscal que se aplica en la declaración de Renta de cada año. Para ello, según explican los citados expertos cuando llegue el momento de presentar la declaración habrá que asegurarse de que la casilla correspondiente a la “Deducción por inversión en vivienda habitual” esté debidamente marcada. 

Además, se debe comprobar que las cantidades que se hayan satisfecho por la hipoteca durante el ejercicio fiscal que se declara sean las correctas. 

¿Qué pasa si se han modificado las condiciones de la hipoteca?

Una duda que puede surgir a la hora de aplicar esta deducción es ¿qué pasa si se cumplen todas los requisitos, pero se han modificado las condiciones de la hipoteca?

Desde Help My Cash explican que las modificaciones de las condiciones de la hipoteca relativas a un cambio en los tipos de interés o el plazo de amortización, no afectan al derecho a la deducción. 

Sin embargo, en el caso de que lo que se modifique sea el capital pendiente, sí que se verá afectado. Si se amplía el importe de la misma solo será posible desgravar la parte correspondiente al capital original, es decir, el que existía antes de la ampliación.