Cuando recibimos una herencia debemos de saber que es una ganancia patrimonial y existe la obligación con la Agencia Tributaria de realizar el pago del Impuesto sobre Sucesiones, es decir, que actúa como un heredero más para Hacienda. Al igual que el resto de impuestos, su pago es obligatorio, ya que, de lo contrario, no se podrá heredar tal y como regula el 17 del Reglamento del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones (publicado en este enlace del Boletín Oficial del Estado).
Sin embargo, hay ciertas reglas generales para este impuesto, dependiendo de la Comunidad Autónoma de España el importe puede variar, incluso hay comunidades donde ya no hay que pagar el Impuesto de Sucesiones. El importe de este impuesto también puede variar dependiendo del grado de parentesco entre el fallecido y el heredero (por ejemplo, si eras su hijo o su primo).
Además, el impuesto de sucesiones es gradual, lo que significa que si heredas mucho, deberás pagar más por tener derecho a ello, aun siendo una herencia. Así mismo, no puedes cambiar de comunidad autónoma para pagar menos. Se debe tributar en la comunidad autónoma en la que residía el fallecido.
Las Comunidades Autónomas con mayores bonificaciones
El Índice del Impuesto sobre Sucesiones sitúan a Andalucía, Islas Baleares, Cantabria y Galicia con una puntuación de 10. A estas le siguen, Castilla y León, Madrid, Extremadura y Murcia, con unas puntuaciones por encima del 9,8.
En la parte más baja de la tabla se encuentra Asturias con una puntuación de 0,87, siendo esta la que cuenta con la mayor carga tributaria sobre el Impuesto de Sucesiones. A esta Comunidad Autónoma le sigue la Comunidad Valenciana y Aragón con puntuaciones de 4,16 y 4,78 respectivamente. Cabe señalar que Cataluña y La Rioja también se hallan entre las comunidades con menos beneficios en este impuesto.
El Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones en Europa tiene ciertas semejanzas con el Impuesto sobre el Patrimonio. Una peculiaridad de este impuesto es que puede representar una doble tributación: se cobra sobre bienes que ya han sido sujetos al impuesto sobre la renta. Sin embargo, las regulaciones actuales permiten a las Comunidades Autónomas conceder descuentos que pueden llegar hasta el 100%. Esto les da la capacidad de eximir completamente a los residentes de la Comunidad de pagar este impuesto.
Países donde no existe el impuesto de sucesiones
Aunque en España el Impuesto de Sucesiones y Donaciones pueda parecer común y habitual, hay países donde este tributo es inusual o incluso inexistente. Entre los países que han eliminado este impuesto o donde nunca se ha implementado, encontramos a Suecia, Eslovaquia, Letonia, Estonia, Austria, Noruega, República Checa, Israel, Canadá, Nueva Zelanda, México y Australia, entre otros.
La percepción sobre el Impuesto de Sucesiones y Donaciones varía según el país. En muchos lugares, se considera injusto pagar un impuesto sobre un bien o valor que ya ha sido gravado anteriormente. Según cifras de la OCDE de 2021, en España, este impuesto solo aportó el 0,76% del total recaudado en concepto de tributos. Sin embargo, en naciones como Finlandia, donde el tipo impositivo máximo es bastante más bajo (con un tope del 33%), sorprendentemente, se alcanzó el mismo porcentaje de recaudación, el 0,76%, que España en ese mismo año.
En España el tipo máximo de gravamen es del 34%
El impuesto sobre sucesiones y donaciones se plantea como una herramienta para equilibrar las desigualdades económicas. Sin embargo, su eficacia en España es discutible. Aunque su objetivo es redistribuir la riqueza, su capacidad recaudatoria es limitada, y la falta de un sistema de redistribución efectivo en el país puede provocar más desajustes.
En términos numéricos, España tiene un tipo impositivo máximo para este impuesto del 34%. Pero algunas regiones, como Asturias y Murcia, han decidido incrementarlo al 36%. Estos porcentajes pueden parecer elevados, pero la realidad es más compleja. Dependiendo del parentesco entre el donante y el receptor, y del patrimonio que este último ya posea, el impuesto puede aumentar. De hecho, al incluir estos coeficientes, el impuesto puede llegar hasta el 81,6% en general y hasta el 87,6% en Asturias y Murcia. Estas cifras sitúan a España en una posición destacada en Europa por tener uno de los gravámenes más altos.
Para ofrecer una perspectiva comparativa, en Bélgica el impuesto alcanza el 80%. Sin embargo, hasta trece comunidades autónomas en España tienen un tipo impositivo máximo que supera ese porcentaje. Incluso con tasas más bajas que el máximo estatal, las regiones de Andalucía y Navarra tienen impuestos que superan a los de países como Luxemburgo. Por su parte, las tres provincias vascas, con un impuesto del 42,56%, superan a naciones como Reino Unido, Holanda y Finlandia en este aspecto.
Otras noticias interesantes
-
Así puedes comprobar si has recibido una herencia sin preguntar a otros herederos
-
Qué pasa si se hereda una casa con una hipoteca inversa, ¿se la pueden quedar los herederos?
-
¿Pueden los nietos heredar directamente de los abuelos?
Lo más leído
-
Cómo influye la inteligencia emocional en el rendimiento de los niños
-
Yolanda Díaz confirma las 7 medidas laborales que servirán de escudo al empleo por la DANA
-
La Seguridad Social ya tiene disponible el nuevo teléfono para resolver dudas del Ingreso Mínimo Vital
-
La nueva ayuda de 480 euros del SEPE que se cobra de manera indefinida si cumples este requisito
-
Precio de la luz por horas mañana, 5 de noviembre: cuándo será más barata y cara
-
Un trabajador cuenta cómo su jefe le obligó a trabajar durante la DANA y Trabajo lanza una advertencia