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Trump impone aranceles del 25 % a los automóviles y amenaza con ampliar la medida a Canadá y la UE

El presidente estadounidense comunicó este miércoles que se gravará con un 25 % de arancel a todos los vehículos que entren al país desde el extranjero.


El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, muestra la orden ejecutiva con la que formaliza los aranceles
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, muestra la orden ejecutiva con la que formaliza los aranceles |EFE
Francisco Miralles
Fecha de actualización:

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump ha anunciado la imposición de aranceles del 25 % a todos los vehículos y piezas automotrices importadas a Estados Unidos a partir del 2 de abril, una decisión que ha intensificado la tensión comercial con socios como Canadá, la Unión Europea y Japón. Con la medida, quiere mejorar la economía de la industria automovilística nacional, la cual ha sido recibida con críticas por parte de gobiernos afectados, aunque sí con respaldo desde el sindicato automotriz estadounidense.

Desde la Casa Blanca, Trump firmó una orden ejecutiva para activar estos nuevos gravámenes, con el pretexto de que podrían generar entre 600.000 millones y un billón de dólares en ingresos en los próximos dos años. “De manera efectiva cobraremos un arancel del 25 % a los automóviles”, declaró durante el acto. El republicano dejó claro que los vehículos fabricados en EE.UU. quedarán exentosy subrayó que la medida está diseñada para atraer a los fabricantes extranjeros a instalar plantas en suelo estadounidense.

Si manufacturas tu vehículo en Estados Unidos, no hay aranceles”, ha insistido, citando el caso de Honda, que recientemente decidió producir un nuevo modelo en su planta de Indiana en lugar de México.

Trump también propuso al Congreso aprobar deducciones fiscales en préstamos para la compra de vehículos fabricados en el país y afirmó que vigilará que las autopartes también se ajusten a estas normativas, evitando esquemas que eludan el arancel a través de ensamblajes mixtos.

Esta medida ha sido respaldada por el sindicato United Auto Workers (UAW), que valoró las palabras del presidente de los EE.UU. como “el fin del desastre del libre comercio”. Su presidente, Shawn Fain, aseguró que las nuevas tarifas suponen “un hito histórico” en la protección de los trabajadores del sector. “Terminar con la carrera a la baja en la industria del automóvil comienza por arreglar nuestros acuerdos comerciales rotos”, declaró.

Amenazas a Canadá y a la Unión Europea

El primer ministro de Canadá, Mark Carney
El primer ministro de Canadá, Mark Carney | Foto: EFE

Horas después de este anuncio, el expresidente advirtió a través de su plataforma Truth Social que podría imponer aranceles “mucho mayores” a Canadá y la Unión Europea si considera que actúan de forma conjunta para dañar la economía estadounidense. “Se impondrán aranceles a gran escala, mucho más altos que los actuales, para defender al mejor amigo que cada uno de esos dos países ha tenido jamás”, escribió.

Sobre estas declaraciones, el primer ministro canadiense, Mark Carney, las calificó como un “ataque directo” y anunció la convocatoria urgente de su gabinete para estudiar la situación. Carney señaló que la respuesta de su Gobierno podría incluir medidas no arancelarias y advirtió del impacto negativo que sufriría la economía del país.

Por su parte, las asociaciones del sector automovilístico en Canadá han alertado que este tipo de medidas podría provocar una crisis industrial, dado que muchas piezas cruzan la frontera varias veces antes de ensamblarse en un vehículo final. “Lo que necesitamos es producir más de esos vehículos aquí en Canadá”, subrayó el primer ministro.

Japón rechaza la medida y prevé pérdidas millonarias

Fotografía de archivo del primer ministro de Japón
Fotografía de archivo del primer ministro de Japón | Foto: EFE

Desde Japón, el primer ministro Shigeru Ishiba anunció que su Gobierno responderá “con todas las opciones disponibles”, al considerar que los aranceles pueden afectar gravemente a la relación económica bilateral y al comercio mundial.

La industria nipona estima que estos aranceles podrían suponer un sobrecoste de hasta 3,2 billones de yenes (unos 19.800 millones de euros), especialmente para fabricantes como Mazda, que exporta desde Japón la mitad de los vehículos que vende en EE.UU. En este sentido, las acciones de la compañía llegaron a caer más del 6% en la Bolsa de Tokio tras conocerse el anuncio.

Desde 2019, Japón es el mayor inversor en Estados Unidos”, recordó el portavoz del Gobierno, Yoshimasa Hayashi, quien calificó la medida de “extremadamente lamentable”.

Bruselas evalúa contramedidas, pero insiste en el diálogo

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen | Foto: EFE

En Bruselas, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, lamentó “profundamente” la decisión de Washington y confirmó que la UE evaluará su respuesta en los próximos días, aunque no cierra la puerta del todo a pesar de las posibles represalias. “Seguiremos buscando soluciones negociadas, protegiendo al mismo tiempo nuestros intereses económicos”, afirmó en un comunicado.

El comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, ya había anticipado que la Comisión trabaja en contramedidas por valor de hasta 26.000 millones de euros, aunque prefiere esperar hasta mediados de abril para activar ambos paquetes previstos, de 8.000 y 18.000 millones de euros respectivamente.

La nueva “guerra” comercial

El próximo 2 de abril, Trump prevé anunciar una nueva batería de aranceles recíprocos a los países que mantengan gravámenes sobre productos estadounidenses. La fecha, que el propio mandatario ha denominado “día de la liberación”, podría marcar una nueva etapa de tensiones en el comercio global, especialmente si los socios afectados optan por respuestas coordinadas.

Los analistas avisan de que estas medias podría alterar las cadenas de suministros internacionales, lo que repercutirá sobre miles de empleos, sin dejar a un lado mayores precios y una inestabilidad económica en multitud de países.