Reyes Pro, historiadora: "nos estamos adaptando al gusto del turista, no solamente en los horarios, sino hasta en las comidas. Pides espinacas con garbanzo y son hierbitas hervidas"
La historiadora advierte de que la adaptación constante al turismo está diluyendo la identidad cultural, alterando la gastronomía, los usos urbanos y la vida cotidiana de las ciudades.


