Una mujer jubilada de 95 años ha expresado lo mal que lo está pasando al vivir al lado de un piso de okupas donde, como asegura, se ejerce la prostitución, hay tráfico de drogas y el ruido no termina cada noche. Los vecinos de este bloque de Palma de Mallorca denuncian la situación inadmisible que les ha tocado vivir al aguantar cada día todo lo que hacen los okupas.
Todo empezó, como relatan estos vecinos, cuando un grupo de personas okuparon el pasado mes de febrero un piso en el edificio y desde entonces su vida no ha vuelto a ser la misma. Ruido todas las noches, consumo de drogas y alcohol y prostitución clandestina, como denuncia una de las vecinas en el programa Vamos a ver de Telecinco.
María, vecina de 95 años, ha sido la encargada de denunciar esta situación ante las cámaras de la cadena televisiva, explotando de indignación y lamentándose por lo bien que vivían antes y lo mal que están ahora: "Era un barrio tranquilo, ahora nuestra vida no es tranquila".
“A veces abro la puerta y entra uno sin llave”
La vecina critica el ruido constante y las formas de los okupas: "A veces abro la puerta y entra uno sin llave. Entran y no dicen nada. Eso es molesto. Parece que me empujan para que puedan entrar ellos. Y este ruido, la música tan fuerte toda la noche es de lo que más se quejan".
Algunos vecinos necesitan medicarse para poder dormir
Esto provoca que incluso muchos vecinos necesiten medicarse para poder dormir, como explica María: "Han tenido que ir al médico para que les dé algo para dormir. Yo estoy un poco más lejos y no me molesta tanto. Suelo dormir bien, pero tengo vecinas que no duermen y lo pasan muy mal".
Otra vecina denuncia que incluso tiran desechos del perro por el balcón. Vicky, que es una camarera del bar que está abajo, explica este 'modus operandi' que parece más propio de animales que de okupas, incluso. "De este balcón caen y me toca limpiarlo a mí por las mañanas. En vez de recogerlo, lo tiran para abajo".
La camarera afirma que hace unos días "un tampax dentro del rollito de papel salió disparado por la ventana, pero dijeron que se les cayó".
“Cada día la mierda está aquí”
Vicky no se quedó de brazos cruzados y obligó a los okupas a bajar a recogerlo: "Yo tenía clientes en la terraza y nos pusimos todos en contra de ellos. Pero cada día la mierda está aquí".
"Están okupando el piso de arriba y uno de ellos dice que no puede trabajar. La vida nos la buscamos todos, para trabajar no está bien, pero para estar de fiesta todo el día sí".
“Es un sinvivir. No se puede aguantar. Estamos indignados. La vecina de arriba se ha ido porque es insoportable", comenta una vecina muy alterada. "No podemos más. Nos obligan a convivir con la delincuencia organizada”, termina con indignación.
