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Dan Buettner, experto en longevidad: “Las personas más felices trabajan menos de 35 horas a la semana y dormir poco puede restarles hasta un 30% de felicidad”

Para el investigador, el ser felices y vivir más años no depende de hacer milagros y sí, de tener una rutina sencilla y que pueda ser sostenible en el tiempo.

El investigador Dan Buettner, experto en longevidad Dan Buettner
El investigador Dan Buettner, experto en longevidad Dan Buettner |Instagram
Francisco Miralles
Fecha de actualización:
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¿Qué es la felicidad? Hay personas que piensan que es tener mucho dinero o alcanzar un alto puesto en la empresa donde trabajamos, pero a lo mejor la felicidad no está en la grandes cosas y sí, en las pequeñas, de ahí que “el tamaño no importa”. Acciones como dormir bien, ver una serie acompañado o disfrutar de una cena a la luz de la luna son pocos minutos que sumados a lo largo de la vida pueden ayudarnos a ser más felices. Esto no es una utopía y cada vez más investigadores demuestran que no es necesario conseguir grandes logros, sino la calidad de nuestras “pequeñas rutinas”.

En este sentido, Dan Buettner (autor y explorador, referente internacional en longevidad) lleva ya muchos años desmontando mitos sobre lo que realmente nos hace sentirnos felices. ¿Qué ha descubierto? Que para ser felices no hay ni secretos ni fórmulas mágicas, ya que depende de gestos sencillos y de una rutina bien pensada.

Mujer feliz despertándose
Según Dan Buettner, trabajar menos de 35 horas y dormir bien aumenta la felicidad | Envato

La diferencia entre una vida feliz y otra mediocre empieza cada mañana, y se construye a lo largo del día”, explica Buettner, que ha dedicado su carrera a estudiar los llamados ‘Blue Zones’, lugares donde la gente supera los 100 años con buena salud. En su video, publicado en la red social Instagram, pone el foco en lo cotidiano y lo social.

“Menos de seis horas de sueño, la felicidad cae en picado”

Para Buettner, el primer gesto del día marca el tono de todo lo demás. “Despertarse sin alarma y dormir lo necesario puede cambiar radicalmente tu estado de ánimo”, señala. Su recomendación es clara y pide priorizar entre ocho y nueve horas de descanso, evitando el despertador siempre que sea posible. Las cifras, dice, hablan por sí solas: “Con solo seis horas de sueño, la felicidad cae en picado, hasta un 30% menos”.

La alimentación también juega su papel y dice que “empezar el día con un desayuno vegetal es fundamental. Olvídate del exceso de grasas o azúcares. Tu cuerpo y tu energía lo notarán durante toda la jornada”. Una propuesta sencilla que cualquiera puede adoptar.

“Somos más felices si trabajamos menos de 35 horas”

El mensaje no va solo para lo social, también incluye lo profesional y sobre todo en las horas que pasamos trabajando. “Las personas más felices suelen trabajar menos de 35 horas a la semana, siempre que tengan cubiertas sus necesidades” asegura.

La diferencia, según él, está en el tiempo que se gana con actividades gratificantes y relaciones sociales. Como explica “compartir un café, un paseo o una comida con alguien que te cae bien tiene un impacto enorme en tu bienestar. No subestimes el poder de la buena compañía”.

“Menos de 30 minutos de usar las redes sociales”

No todo es descanso o amigos, también el qué hacemos por los demás. “Dedica cada día un momento a ayudar a otros. Los datos demuestran que quienes hacen voluntariado son, de media, más felices”, explica Buettner. Además, pertenecer a una comunidad, religiosa o de cualquier tipo, aparece en sus estudios como uno de los grandes aliados de la felicidad. “No importa la fe, sino sentirse parte de algo más grande”, resume.

Pareja feliz desayunando
Compartir tiempo con amigos y familiares es esencial para la felicidad, según el experto | Envato

Por otro lado, en cuanto a las redes sociales y televisión, Buettner no las demoniza, pero sí pone límites: “30 minutos al día pueden tener un efecto positivo, pero si pasas de hora y media, tu bienestar empieza a bajar”. Por eso, la clave está en buscar ese equilibrio y en no dejar que las pantallas y las redes absorban nuestra vida y nos quiten de otras tareas que sí son importantes como ejercicio físico, la charla o el descanso.

En resumen, el experto en longevidad invita a cuestionar lo obvio y probar pequeñas modificaciones cotidianas: dormir bien, desayunar sano, trabajar menos, cuidar las relaciones, ayudar y moverse a diario. “Las cartas se apilan a tu favor si prestas atención a los hábitos que suman, y no a la acumulación de dinero o logros”, concluye.