Hay profesiones que no parecen reales, como si solo pudieran existir en la ficción. Y la de Estrella Alonso es una de ellas. Esta joven española ha sorprendido a miles de usuarios al desvelar uno de estos ‘secretos’ del mercado laboral: cobra por leer libros. Su vídeo viral no solo ha despertado la curiosidad, sino también una envidia sana de quienes sienten la lectura como una pasión.
Esta joven trabaja de lectora y como ella misma explica, “consiste en leer bien manuscritos, bien obras que en su país de origen estén teniendo éxito”. De forma más detalla, se trata de leer el libro, “analizarlo críticamente y escribir un informe en el que hablo de la trama, de la estructura, del estilo y lo valoro”.
Sobre cómo se consigue un puesto así, en su caso fue “un poco accidental”. Cuando vivía en Londres, trabajaba como ‘babysitter’ y, la madre de uno de los niños, trabajaba para una agencia. “Nos llevamos fenomenal, nos unió la pasión por los libros y de ‘babysitter’ pasé a profesora de castellano y de profesora de castellano a lectora. Hice una prueba y aquí estamos”, confiesa.
“Depende de cuántas páginas tenga un libro, te pagarán más o menos”
Entrando en las características de este trabajo, Estrella Alonso explica que el salario “va por libros”, y no por horas. “Depende de cuántas páginas tenga un libro, te pagarán más o menos. Y hay que leer rápido”. Ella suele tardar en leer los libros entre 2 o 3 días y, si tienen más páginas o es más denso, intenta que no sea más de una semana.
Otra pregunta recurrente es cómo se organiza para leer tantos libros, a lo que también responde: “Leo en todas partes. Leo en la cama, en la casa, en la calle, en el gimnasio, en transporte público, en la cola del supermercado… En cuanto hay una pausa, es un buen momento para sacar el Kinder y leer”.
“Una no se hace rica con este trabajo, así que tengo que compaginarlo con un montón de cosas más”
Aunque el empleo de lectora puede sonar ideal, Estrella Alonso aclara que “una no se hace rica con este trabajo, así que tengo que compaginarlo con un montón de cosas más”. En un segundo vídeo, también matiza que no trabaja para una agencia, sino para una scout literaria. “Una scout se dedica a conectar a las agentes y a sus autoras con editoriales en otros países y así tramitar la compraventa de derechos para la traducción o adaptación audiovisual”, detalla.
Respondiendo otra de las preguntas más frecuentes, esta joven también cuenta cómo hace para diferenciar la lectura de ocio y la lectura de trabajo: “Creo que cuando estoy leyendo para el trabajo, sobre todo si es ficción, llega un momento en el que cuando ya he captado el estilo y digamos la voz y la esencia de la autora, me centro mucho más en la trama, porque al final si estoy haciendo un informe sobre un thriller con vistas a adaptarlo a la televisión, es importante saber quién es la asesina”.
En cambio, cuando lee por placer, “leo más despacio y leo fijándome en otras cosas como la literación, que es algo que últimamente me encanta y la forma, digamos, ver como cómo esta persona ha sido capaz de crear esta imagen con estos medios”.
Ahora, sin ninguna duda, la pregunta más repetida es qué se puede hacer para trabajar de lectora, dando Estrella Alonso una serie de consejos, si bien su caso fue muy particular: “Yo escribiría un buen currículum, una buena carta de motivación, haría quizá un pequeño informe de mentirijilla de un libro de esa editorial que os guste y lo mandaría”.
En último lugar, advierte de que no se trata de un empleo etable, y que no se puede vivir únicamente de él: “Al mes puedo leer cinco o seis libros. Hay meses mejores en los que leo 10 y hay meses en los que leo dos. Entonces, como os he dicho, no es un trabajo muy estable. Hay que hacer más cosas a la vez”, concluye.

