El grupo alimentario Nestlé reducirá su plantilla mundial en 16.000 empleos en los próximos dos años, un recorte equivalente al 6% de su fuerza laboral, dentro de un plan de reestructuración con el que prevé ahorrar 3.000 millones de francos suizos (3.228 millones de euros) para finales de 2027.
Nestlé, junto a Coca-Cola y otras tantas multinacionales, es una de las mayores corporaciones a nivel mundial del sector alimentario que controlan casi todo en el mercado de la producción de comestibles y bebidas.
“El mundo está cambiando y Nestlé necesita cambiar más rápido. Esto incluirá tomar decisiones difíciles, pero necesarias para reducir la plantilla en los próximos dos años”, ha indicado Philipp Navratil, consejero delegado de Nestlé, quien asumió el cargo el pasado mes de septiembre tras el despido de Laurent Freixe por infringir el código de conducta de la empresa.
Un recorte concentrado en oficinas y plantas de producción
El ajuste afectará principalmente a 12.000 empleados administrativos de distintas regiones y divisiones, con un ahorro anual previsto de 1.000 millones de francos suizos (1.076 millones de euros), el doble del plan inicial. Además, se contempla la supresión de otros 4.000 puestos en las áreas de fabricación y cadena de suministro, en línea con los programas de eficiencia que Nestlé ya tiene en marcha.
La empresa ha advertido de que los costes extraordinarios de reestructuración serán elevados (equivalentes a duplicar el ahorro anual esperado) y no ha precisado aún el alcance territorial del recorte. En España, Nestlé aseguró desconocer de momento el impacto local del anuncio, que ha despertado inquietud entre los sindicatos.
Por su parte, la organización CSIF ha reconocido “inquietud” entre los trabajadores y ha reclamado información detallada sobre cómo afectará la decisión a las plantas y oficinas del grupo en el país.
Un giro estratégico hacia la rentabilidad y la innovación
En su presentación ante analistas, Navratil subrayó que la compañía endurecerá su disciplina financiera.
“A medida que Nestlé avanza, seremos rigurosos en nuestro enfoque de asignación de recursos, priorizando las oportunidades y los negocios con mayor potencial de rentabilidad”, señaló.
El directivo agregó que la firma será “más audaz al invertir a gran escala e impulsar la innovación para lograr un crecimiento acelerado y la creación de valor”. En esta nueva etapa, Nestlé quiere reforzar la inversión en las áreas de crecimiento más sólidas y mejorar su conocimiento del consumidor a través del marketing y la digitalización.
“Junto con otras medidas, estamos trabajando para reducir sustancialmente nuestros costes y hoy estamos aumentando nuestro objetivo de ahorro a 3.000 millones de francos suizos para finales de 2027”, afirmó el consejero delegado, quien insistió en que las acciones “asegurarán el futuro de Nestlé” como líder global del sector y “permitirán mejorar el rendimiento general y generar valor para los accionistas”.
“Estamos fomentando una cultura que adopta una mentalidad de rendimiento, que no acepta perder cuota de mercado y donde ganar es recompensado”, añadió Navratil.
Resultados en retroceso y previsiones prudentes
Los resultados de los nueve primeros meses de 2025 reflejan un descenso del 1,9% en las ventas globales, hasta 65.869 millones de francos (70.880 millones de euros). Sin embargo, en términos orgánicos —es decir, sin contar los efectos del tipo de cambio— el crecimiento fue del 3,3%, impulsado por una subida media de precios del 2,8%.
Por regiones, el negocio se contrajo un 4,8% en América, mientras que creció un 2,6% en Europa y un 2,5% en Asia. Las divisiones de Nespresso y Nestlé Health Science mostraron evoluciones dispares: la primera aumentó sus ventas un 2,6%, mientras que la segunda retrocedió un 1,4%.
En el tercer trimestre, las ventas alcanzaron 23.287 millones de euros, un 2% menos en términos absolutos, pero con un avance del 4,3% en términos orgánicos, lo que la compañía interpreta como una señal de recuperación.
“Impulsar el crecimiento liderado por RIG (crecimiento interno real) es nuestra prioridad número uno. Hemos incrementado la inversión para lograrlo, y los resultados están empezando a verse. Ahora debemos hacer más y actuar con mayor rapidez para acelerar nuestro crecimiento”, afirmó Navratil.
Objetivos para el cierre de ejercicio
Nestlé confía en que el crecimiento orgánico de las ventas mejore respecto a 2024 y prevé mantener un margen subyacente de al menos el 16%, pese al efecto negativo de los aranceles y los tipos de cambio.
La reestructuración anunciada forma parte de una estrategia más amplia de adaptación a un contexto de inflación persistente, costes energéticos elevados y desaceleración del consumo, que afecta a todo el sector de la alimentación en Europa.

