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Llevan cuatro años observando el teletrabajo y lo tienen claro: "Trabajar desde casa nos hace mucho más felices"

El teletrabajo no solo mejoro la salud mental de los trabajadores, sino que se conseguía 10 días extras de tiempo libre al año.


Una mujer joven teletrabajando
Una mujer joven teletrabajando |Imagen ilustrativa
Francisco Miralles
Fecha de actualización:

Un equipo de investigadores de la Universidad del Sur de Australia ha analizado durante cuatro años como afecta el teletrabajo en la vida de los empleados, llegando a la conclusión de que: “trabajar desde casa nos hace más felices”. El estudio, que ya estaba en marcha antes de la pandemia de la COVID-19, permitió observar en tiempo real cómo el bienestar de los trabajadores evolucionaba con la implantación del trabajo remoto. A pesar de la posibilidad de elegir donde se quiere trabajar mejora la salud mental y física de los trabajadores, todavía hay materia pendiente en cuenta a relaciones sociales y la productividad.

Según este estudio, antes de la pandemia, el trabajador medio en Australia estaba unas 4,5 horas semanales desplazándose a la oficina. Según los investigadores, esas horas de transporte “suelen ir de la mano de una peor salud mental y con puntuaciones más bajas en la valoración de nuestra propia salud”. Con la llegada del teletrabajo, ese estrés del transporte se perdió, con lo que además ganaban horas de descanso para dormir y por ejemplo, desayunar con más tranquilidad.

Otro estudio, este realizado en España, da la razón a esta conclusión. Según su análisis, quienes trabajan en remoto “tienen al año diez días extra de tiempo libre frente a quienes van a la oficina”. De este tiempo, un 33 % se dedica al ocio, lo que, según los investigadores, implica “más oportunidades de ser físicamente activo y menos sedentario”. Aun así, explican que parte de esas horas a veces se utiliza para trabajar más o en tareas de cuidado.

Teletrabajo

Otro estudio, esta vez de la Universidad del Sur de Australia también ha analizado cómo el teletrabajo ha modificado nuestra forma de alimentarnos. El estudio de la U. Los investigadores han observado que “la comodidad de la proximidad a nuestras cocinas ha hecho que aumente el consumo de aperitivos”. Es decir, que nos alimentamos peor, pero esta tendencia se ha equilibrado con una alimentación más variada y saludable, con un incremento en el consumo de frutas, verduras y lácteos, así como en la preparación de comidas en casa.

También vieron y sobre todo, durante los primeros días de confinamiento que “las personas que trabajaban desde casa dormían casi media hora más y bebían algo más de alcohol”. Ahora, el estudio no señala que esta tendencia se haya mantenido en el tiempo.

Más productivos

La gran polémica del teletrabajo es, si somos más productivos o no. Según la investigación, cuando los empleados trabajan desde casa por obligación, como ocurrió durante los confinamientos, la salud mental y el bienestar tienden a empeorar. En cambio, si el teletrabajo es una opción y estudio demuestra que mejora la “su salud mental y su bienestar ”.

Otras de las dudas que genera esta modalidad de trabajo es sobre las oportunidades de promoción. El estudio reconoce que “la conexión con los compañeros es difícil de reproducir a distancia” y que esto puede afectar a la colaboración dentro de la empresa. Aun así, los investigadores creen que “el rendimiento laboral y la productividad parecen mantenerse estables o, en la mayoría de los casos, mejorar cuando se trabaja desde casa”.

Sobre la postura de algunos directivos que afirman que el teletrabajo reduce la productividad, los expertos consideran que, en muchos casos, esto “responde más a una falta de gestión que a un problema real de rendimiento”. Además, los trabajadores que tienen un modelo híbrido o completamente remoto destacan que su “satisfacción laboral y bienestar son mayores”.

Para terminar, señalan que el teletrabajo no es la única solución para mejorar la calidad de vida de los trabajadores, pero sí “una opción más para mejorar el entorno laboral y hacerlo más inclusivo y flexible”. Las empresas deberán equilibrar las ventajas del trabajo a distancia con la necesidad de mantener la cohesión de los equipos. “Nuestro enfoque del trabajo debe evolucionar, abarcando la diversidad de necesidades y estilos de vida”, concluye la investigación.