Los Técnicos del Ministerio de Hacienda, agrupados en el sindicato Gestha, han convocado una jornada de huelga y una concentración en Madrid para el 26 de noviembre, en protesta por el bloqueo de su carrera profesional, la falta de movilidad geográfica y funcional, y la ausencia de reconocimiento legal de sus funciones. Consideran que esta situación está mermando la eficacia de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT) y del Ministerio de Hacienda en la lucha contra el fraude fiscal.
Según denuncia el colectivo, la falta de una carrera profesional estructurada conforme al Estatuto Básico del Empleado Público está provocando un deterioro progresivo en la estructura administrativa y una pérdida de recursos humanos clave. Esta situación “perjudica tanto a los contribuyentes que sí cumplen como a los servicios públicos que se financian con sus impuestos”, aseguran.
Como síntoma de ese debilitamiento, Gestha señala que desde 2011 las denuncias por delitos fiscales se han desplomado un 82 %, lo que, en su opinión, “es una prueba del débil control de los grandes evasores, mientras aumentan los controles a particulares, autónomos y pymes”.
La movilidad es un obstáculo para la eficacia del sistema
Uno de los puntos que más preocupación genera es la política actual de movilidad en la AEAT. Según datos del sindicato, unos 1.200 técnicos desearían trasladarse a destinos donde tienen vínculos familiares, pero no pueden hacerlo debido a un sistema que prioriza a quienes acceden por promoción interna frente a los técnicos con más antigüedad o mejor evaluación.
Gestha advierte de que esta práctica provoca desmotivación, vacantes sin cubrir en zonas con alta economía sumergida y equipos con poca especialización, lo que perjudica gravemente la eficacia del servicio público. “La Administración ya no tendrá técnicos donde realmente los necesita, sino en el lugar desde donde promocione un administrativo o agente tributario”, critican.
Reclaman el reconocimiento de su papel clave en la lucha contra el fraude
Además, los técnicos reclaman que se reconozca legalmente su experiencia, responsabilidades y funciones, en cumplimiento de una disposición recogida en la Ley de prevención del fraude fiscal de 2006, que instaba a desarrollar su carrera administrativa.
Gestha subraya que los técnicos son el mayor colectivo de funcionarios de la AEAT, representando más del 80 % de los empleados del grupo A con competencias en investigación fiscal y aduanera, y el 91 % del personal competente en la Intervención General del Estado (IGAE) encargado del control del gasto público y subvenciones. También son mayoría en los tribunales económico-administrativos, el Catastro y otros centros directivos del Ministerio.
A su juicio, reforzar a quienes están “en primera línea contra el fraude” es una condición básica para disuadir a los grandes defraudadores y para garantizar que el sistema tributario no se centre únicamente en los errores menores de los contribuyentes. También consideran fundamental este refuerzo para mejorar el control del gasto público y recuperar la confianza ciudadana en la Administración.
