Hay historias realmente difíciles de creer. Y la de Joaquín García, conocido como el “funcionario fantasma” es sin duda una de ellas. ¿El motivo? Estuvo al menos 6 años sin trabajar, entre el periodo de 2004 y 2010, y nadie se dio cuenta de ello hasta que fueron a darle un premio a la constancia.
Lo descubrió José Blas, entonces senador del PP y teniente alcalde, quien ha recordado ahora este suceso en el programa de ‘Y ahora Sonsoles’ de Antena 3: “Le dije que viniese a verme y a contarme qué estaba haciendo. No supo qué contarme”. Después de algo así, cualquiera podría pensar que la sanción fue ejemplar, pero este funcionario fue más listo que nadie y, como tenía la edad, se prejubiló.
De ese modo, pudo reducir notablemente la misma. El medio ‘Confilegal’, en 2016, analizó la sentencia del caso, donde se puede ver que, durante el mencionado periodo, el que no hacía nada, cobraba puntualmente su nómina, que ascendía a 37.000 euros brutos anuales. Así, teniendo en cuenta que estuvo en esta situación durante 6 años, se llevó unos 222.000 euros sin, literalmente, ‘dar un palo al agua’.
Solo pudieron suspenderlo de empleo y sueldo 4 meses
Este funcionario, según describió ‘Confilegal’, era ingeniero y había sido director técnico del área de Medioambiente del Ayuntamiento de Cádiz hasta 1998. Dicho año, lo destinaron a un edificio fuera del ayuntamiento, concretamente a la sede de Aguas de Cádiz, para que supervisara las obras de la estación de La Martona.
Sin embargo, no llegó a estar ni en un lado ni en otro, como descubrió José Blas cuando se interesó por su “trabajo”. ¿Cómo fue posible? Al parecer, en la empresa municipal Aguas de Cádiz pensaban que había regresado al Ayuntamiento. Y, por su parte, en el Ayuntamiento entendían que seguía en dicha empresa.
El funcionario, como defensa, alegó que “decidió irse a casa” ante las discusiones que mantenía por aquel entonces el Consistorio y la Junta con dicha obras. Y ahí se quedó esperando hasta “que hubiera alguna solución y se le comunicara”. Cuando se descubrió todo, el Ayuntamiento de Cádiz le abrió en octubre de 2010 un expediente disciplinario, por una falta muy grave por ““abandono de servicio” y “falta injustificada”, ambas contempladas en el Estatuto Básico del Empleado Público.
Sin embargo, la sanción solo pudo ser la suspensión de empleo y sueldo durante 4 meses, ya que el funcionario se acogió a su derecho a pedir la jubilación anticipada, ya que cumplía con la edad y demás requisitos para ello. De ese modo, como se había jubilado, solo tuvo que devolver 26.920,93 euros, el equivalente a un año de salario neto, que era lo máximo que le podían reclamar legalmente. Además, declaró que le estaban acosando, por abrirle el expediente.
A pesar de ello, este intentó reclamar, ya que no quería devolver tal cantidad, pero el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo 1 de Cádiz dio la razón al ayuntamiento. La presentadora Sonsoles Ónega, en su programa, ha rescatado este suceso, declarando que “hay cosas que solo pasan en este país”.
