Comprar una vivienda es caro y las hipotecas no cesan de encarecerse, con pagos iniciales del 20% del valor de la vivienda. Los alquileres también se han disparado, incluso obligando a gente de avanzada edad a compartir piso. Rehabilitar un hogar, otra de las alternativas para entrar a vivir a una casa, también conlleva una importante inversión. Para ello, el Gobierno desplegó ayudas financiadas por los fondos europeos Next Generation.
Sin embargo, se están produciendo retrasos en la concesión de ayudas. Así lo confirmó en la presentación de la actualización de la Guía sobre desgravaciones fiscales para rehabilitación de viviendas y edificios residenciales Francisco Javier Martín, director general de Vivienda y Suelo del Ministerio de Transportes, que instó a solicitar las deducciones fiscales disponibles para mejorar la eficiencia energética de viviendas y edificios y que son compatibles con las ayudas directas y también financiadas con dinero europeo.
“Independientemente de la tramitación de la ayuda, la deducción permite avanzar con la rehabilitación, así que no esperemos a activar el proceso de rehabilitación al momento de tener concedida la ayuda. Se puede hacer antes”, continuó afirmando Martín, que señaló que se espera que este verano se solucionen los atrasos.
Tres nuevas deducciones del IRPF para rehabilitación de vivienda
Es necesario contar con un certificado de eficiencia energética anterior a la obra y otro posterior —que no exceda el 1 de enero de 2024— que garantice que se cumple con los requisitos.
- Hasta 5.000 euros anuales: habrá que acometer una reducción de al menos un 7% en la demanda de calefacción y refrigeración para una deducción del 20% del coste.
- Hasta 7.500 euros anuales: disminuyendo en un 30% o más el consumo de energía primaria no renovable o al mejorar la calificación energética hasta la clase A o B, el tope de deducción es del 40%.
- Hasta 15.000 euros anuales: deducción del 60% por una disminución del consumo de energía en un 30% o una calificación energética A o B. La base máxima de deducción al año son 5.000 euros y el certificado tiene que expedirse antes del 1 de enero de 2025.
Aprovechándose de ellas y de las ayudas públicas a la rehabilitación, se estima que se ahorrarán casi la mitad de la inversión. Por ejemplo, una obra valorada en 5.000 euros que disponga de una ayuda pública de 2.000 podrá recuperar hasta un 52% de inversión.
Cómo hacer la rehabilitación
El CSCAE y el CGE han elaborado una suerte de manual de instrucciones para llevar a cabo un proyecto de rehabilitación con garantías.
- Identificar la necesidad de renovar el edificio.
- Validación de las necesidades con el asesoramiento de profesionales.
- Encargo a los profesionales adecuados.
- Elaboración de documentos y petición de ayudas. En esta fase se piden las ayudas para elaborar el Libro del Edificio Existente o del proyecto, que se complementa con la solicitud de presupuestos de obra.
- Aprobación del presupuesto de obra y solicitud de ayudas.
- Concesión de las ayudas.
- Firma del contrato de obras y solicitud de licencia.
- Ejecución de las obras.
- Pagos. No pueden ser en efectivo. Se deben realizar con tarjeta, por transferencia, cheque nominativo o ingreso bancario. Para aplicar la desgravación en el IRPF, se necesitan los certificados de eficiencia energética anterior y posterior a la obra.
- Justificación de las ayudas.
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