Las previsiones en el euríbor a doce meses, auguran buenas noticias para los hipotecados. Y es que, se espera que el principal indicador para las hipotecas a interés variable baje este mes de julio y permita ahorrar en torno a los 112 euros mensuales aquellos que contratasen sus hipotecas hace un año.
Así lo han recogido desde EFE, a tan solo unos días de que finalice el mes, y con la media provisional del indicador situada en el 2,070%, un 1,456% por debajo de lo que marcaba en julio de 2024, que cerró el mes en el 3,526%, y siendo ligeramente inferior que en junio, en al que indicador marcó un valor del 2,081%.
Como se ha dicho, este indicador afecta directamente a la mayoría de hipotecas a tipo variable, cuya cuota está condicionada a un diferencial fijo, y a una parte variable determinada por un indicador que en la mayoría de casos es el euríbor.
La cuota media de las hipotecas bajaría en torno a los 112 euros mensuales
La previsión en la bajada del euríbor supondría un alivio para las personas con hipotecas vinculadas al euríbor a 12 meses, y es que los intereses de las mismas se revisan de forma mensual.
Por tanto, y según los datos publicados por EFE, para una hipoteca media de 150.000 euros a 25 años, hasta la fecha la cuota de la hipoteca que se venía pagando era de 752,03 euros, por lo que aplicando el tipo medio provisional, (a la espera de la publicación del definitivo al cierre del mes) el pago mensual se reduciría hasta los hasta 640,91 euros, es decir, 111,92 menos.
El BCE mantiene los tipos de interés en el 2%
El euríbor suele anticipar sus movimientos a los de la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) que, tras su reunión del pasado jueves, mantuvo los tipos de interés en el 2%, tras siete recortes consecutivos.
El objetivo de inflación del BCE a medio plazo es del 2%, aunque según las declaraciones de la presidenta del organismo, Christine Lagarde, las previsiones contemplan que la misma se sitúe por debajo del objetivo previsto, alcanzando el 1,6% en 2026.
Desde Banco Central Europeo mantienen sus políticas sobre los tipos de interés, y la propia Lagarde aseguró que no se van a modificar las decisiones en cuanto a los tipos de interés por una si “la inflación presenta una desviación pequeña”.
De este modo y como viene siendo habitual, desde el organismo seguirán basando sus decisiones en el análisis de los datos, evaluando los mismos “reunión a reunión” sobre todo debido a que el entorno económico global sigue siendo “excepcionalmente incierto”, provocado en gran parte por las tensiones comerciales que se están viviendo en los últimos tiempos.

