¿Quieres aprobar los exámenes? Será tan sencillo como jugar una partida al Trivial. O al menos muy parecido. El método Leitner, llamado así por su inventor Sebastian Leitner, permite memorizar datos rápidamente y sin aburrirse. Puede parecer una utopía, pero su técnica de estudio está avalada internacionalmente. Pero vamos a lo importante, ¿qué tienes que hacer? Solo necesitarás una caja, papel y boli.
Si estás cansado de pasar las horas muertas frente a los libros, pensando en todo lo que podrías estar haciendo si no tuvieras que estudiar, te alegrará saber que este método se aplica a cualquier materia. Podrás memorizar datos, vocabulario, fórmulas… ¡Será tu salvación! Primero tenemos que coger el temario y dividir de forma esquematizada lo que tenemos que aprendernos. Este contenido irá plasmado en tarjetas: por una cara se pone una pregunta sacada de dicho temario y por la otra se escribe la respuesta. Por eso recuerda al tradicional juego de mesa.
Realizado este paso, hay que coger la caja y dividirla en 4 compartimentos. Estos espacios corresponden a los apartados de “Diario”, “Semanal”, “Quincenal” y “Mensual”. Ahora, ¿qué hacemos con todo este material? Tenemos que estudiar las tarjetas, con el objetivo de que la mayoría de ellas pasen a la sección de “semanal”. Las que no hayamos sido capaces de memorizar ese día, seguirán en el apartado de “diario”.
Por su parte, las que sí hayan pasado de nivel, tendremos que repasarlas una vez a la semana pues han pasado a la sección "Semanal". Cuando toque repasarlas, las tarjetas que hayamos recordado pasarán al siguiente nivel, “quincenal”, no teniendo que volver a estudiarlas hasta dentro de 15 días. Cuando haya pasado una quincena, las volveremos a repasar. En este punto, las tarjetas que hayamos recordado pasarán a la última fase “mensual”, que es la meta que todas tienen que alcanzar. Así de fácil podrás llegar al examen con todos los temas aprendidos. ¡No te caerá ningún suspenso!
Ventajas del método Leitner
El método Leitner, desarrollado en los años ‘50, cuenta con una serie de ventajas que mejorarán tu estudio. Si ya de por sí que te ayude a preparar los exámenes es un aliciente para probarlo, los beneficios que esconde esta metodología terminarán de convencerte para ponerlo en práctica. Estas son las razones que te animarán a darle una oportunidad, seguro que no te arrepentirás:
- Se puede aplicar a cualquier nivel educativo: oposiciones, exámenes de instituto, selectividad, idiomas o primaria.
- Reparto de los temas: mediante el sistema de tarjetas se repasa aquello en lo que se tiene más dificultad, mientras que se refuerza lo que ya se ha aprendido para no olvidarlo. Así aprovecharás más el tiempo, por lo que podrás disfrutar de más horas de ocio.
- Permite estudiar varias materias a la vez: una de las técnicas de estudio recomendadas por la Universidad de Harvard, de las más prestigiosas del mundo, es combinar distintas asignaturas. Está demostrado que el cerebro retiene la información más fácilmente y se comprende más rápido, que es lo que consigue el método Leitner.
- Se puede utilizar tanto de forma individual como en compañía: podrás estudiar tú solo o bien con un compañero o grupo de estudio, una alternativa para que la labor de estudiar sea más divertida.
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