Telefónica ha reducido finalmente a 4.539 las salidas mínimas previstas en los siete expedientes de regulación de empleo (ERE) planteados en distintas filiales del grupo. Este recorte ha sido clave para que UGT acepte la propuesta, según han confirmado fuentes sindicales tras la reunión final entre la dirección y los representantes de los trabajadores.
La firma del acuerdo está prevista para el lunes 22, aunque todavía queda por conocer la postura de CCOO, que este viernes celebrará un consejo extraordinario para decidir si valida o no la propuesta definitiva de Telefónica. El acuerdo también incluye la renovación de tres convenios colectivos en el grupo.
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En un primer momento, la compañía había planteado hasta 6.088 salidas, por lo que la nueva cifra supone una reducción del 25,45%. Aun así, esas 4.539 salidas podrían ampliarse hasta las 5.040, siempre que todas ellas sean voluntarias.
La mayor parte de los siete ERE afecta a las empresas incluidas en el convenio de empresas vinculadas: Telefónica de España (2.925 salidas), Telefónica Móviles (720) y Telefónica Soluciones (120). A estas se suman las salidas previstas en Telefónica SA (301), Global Solutions (112), Innovación (186) y Movistar+, donde finalmente serán 175.
Este volumen de salidas garantiza que todas ellas sean voluntarias, por lo que no habrá trabajadores afectados de forma forzosa.
Convenios prorrogados hasta 2030
UGT recalca que la propuesta también incluye la prórroga de los convenios colectivos hasta 2030, una condición que el sindicato vinculó “de forma inequívoca” a la firma de los ERE, con el objetivo de blindar las condiciones laborales tras la presentación del plan estratégico del grupo a principios de noviembre.
Según el sindicato, la empresa ha asumido un compromiso de creación de empleo del 10%, a través de nuevos puestos de trabajo orientados a equilibrar la plantilla y los territorios.
UGT asegura haber alcanzado los objetivos marcados en la negociación y, por ese motivo, defiende que refrendará los resultados obtenidos y procederá a la firma de los acuerdos, que se realizará durante la mañana del lunes.
En paralelo, la dirección ha planteado que el convenio especial de cotización garantice las aportaciones a la Seguridad Social, mientras que las personas que no puedan acogerse a prejubilaciones contarán con un paquete compensatorio que eleva las indemnizaciones “muy por encima de lo firmado en el resto de empresas del sector”.
La voluntariedad como eje del proceso
UGT ha insistido en que la voluntariedad será el principio vertebrador de la adscripción, cuyos resultados se conocerán a finales de enero, ya que en las próximas semanas se abrirá el periodo para inscribirse en el ERE a través de las prejubilaciones.
Además, el sindicato señala que las revisiones salariales y la jornada de 36 horas se extenderán a los tres convenios colectivos que amparan a las siete filiales afectadas por los ERE: empresas vinculadas, GBUs —que incluye Telefónica SA, Global Solutions e Innovación— y Movistar+.
“Este acuerdo supone un avance relevante frente a la lógica de destrucción neta de empleo, contribuye al rejuvenecimiento de las plantillas y refuerza la viabilidad a largo plazo, demostrando que es posible abordar procesos de reestructuración sin renunciar a la creación de empleo”, ha defendido el sindicato.