El Congreso de los Diputados debatirá la próxima semana el debate del proyecto de ley para la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas. Aunque, a primera hora de la mañana, el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, no proporcionó una fecha concreta en la rueda de prensa de los datos del paro, según fuentes consultadas por ‘NoticiasTrabajo’, esto se ha aprobado posteriormente en la juta de Portavoces del Congreso celebrada este mismo martes. En concreto, será el próximo 10 de septiembre, cuando se debatirán las enmiendas de PP, Vox y Junts.
Hay que recordar que, inicialmente, este debate estaba previsto para el pasado mes de julio. Sin embargo, el Ministerio de Trabajo decidió retrasarlo debido al ambiente político que se generó tras los presuntos casos de corrupción del PSOE. En este sentido, apelaban a que el debate de una norma tan importante como esta, que podría beneficiar a más de 12 millones de personas trabajadoras, debía darse en “las condiciones más favorables”.
Asimismo, este retraso también se vio como una oportunidad más de ganar tiempo y acercar posturas con Junts, una pieza clave para que la norma pueda ser convalidada en el Congreso de los Diputados y, en consecuencia, pueda llegar a entrar en vigor. Al respecto, señalar que precisamente una de las enmiendas que se debatirá es la del partido de Carles Puigdemont, que se unen a las de PP y Vox. No obstante, aunque sea tres distintas, solo habrá una votación, debido a que todas piden la devolución del texto al Gobierno.
Una votación crucial: la norma podría ser devuelta al Gobierno
La votación del próximo 10 de septiembre será una fecha clave para la reducción de la jornada laboral. El motivo es que PP, Vox y Junts suman mayoría absoluta, por lo que si se pusieran de acuerdo y unieran fuerzas, el Parlamento devolvería la norma al Gobierno, quien tendría que aprobar una nueva y comenzar con el trámite desde cero.
Ante este escenario, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, consciente de esta posibilidad, viene avisando de que, de tumbarse la norma, aprobarían la reforma del registro horario a través de un real decreto ley, asegurado que este pilar de la norma es lo que más oposición genera en las patronales. “Si deciden votar en contra de la reducción de jornada, voy a hacer lo que tengo que hacer, un real decreto que tiene rango reglamentario. El reglamento lo firmo yo”, aseguró Díaz a finales de julio.
Por entonces, afirmó que su “deber” es llevar la rebaja de jornada al Congreso de los Diputados, aunque pueda ser tumbada. “Hace 40 años que no se ha abierto este debate en España”, destacaba, reiterando nuevamente que es “una norma que mejora la productividad, que la quieren los todos los ciudadanos y las ciudadanas españolas voten a quien voten”.
Las ‘confrontaciones’ con Junts
El pasado mes de julio, Junts habría recalcado al Ministerio de Trabajado su interés por proteger a las pymes, autónomos y trabajadores de Cataluña. Estos, según Trabajo, solicitaron “tiempo y seguir trabajando” en esta ley para que se recogiesen “todas” las peticiones, declarando que no era posible “sin consenso” avanzar en la medida.
Sin embargo, Junts negó haber solicitado expresamente dicha prórroga. Entonces, aseguraron que, de haberse producido el debate en julio, habrían mantenido su enmienda de totalidad con la intención de que el texto hubiera sido devuelto al Gobierno, y se frenase su tramitación legislativa. Hace dos meses, también afirmaron que estaban “muy lejos” de llegar a un acuerdo con Trabajo, pero que seguirían trabajando para proteger a las pymes.
Ciertamente, ayer mismo, Yolanda Díaz aseguró que seguían “negociando y trabajando intensamente” para conseguir los apoyos necesarios y que la norma pueda ser convalidada en el Congreso de los Diputados. “No hay mejor política útil que meterse en la vida de 12 millones y medio de personas, que son los afectados”, señaló la ministra, quien afirmó que este verano había estado con jóvenes votantes del PP que “de lo que me hablaban era de esto y de los permisos”.
El PP se habría negado a debatir con Trabajo
También este lunes, Yolanda Díaz explicó que el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, había dado la orden de que el Partido Popular no se reuniese con ella para abordar la reducción de la jornada laboral. “Es que es muy grave que una formación política que dice que quiere gobernar España no se reúna con una vicepresidenta para hablar de un tema central que tiene que ver con la vida de los trabajadores, con la productividad de las empresas, con las pequeñas empresas”, denunció.