Buscar trabajo cuando se está desempleado puede resultar frustrante e incluso agotador. No son pocas las personas que aseguran que, día tras día, se levantan y se acuestan con correos donde su solicitud ha sido rechazada, sin saber por qué, o directamente, no han obtenido respuesta alguna. Jimena García, que ha vivido esta situación en primera persona, ha querido dar voz a esta etapa que resulta difícil de transitar para la mayoría.
“¿Por qué nadie habla de lo difícil que es conseguir trabajo? Es que, a ver, llevo 4 meses buscando trabajo, literal 4 meses activamente buscando trabajo. Y ya me harté. Te juega un papel muy importante en la cabeza”, comienza relatando. Sobre sus efectos en tu seguridad y estado de ánimo, asegura: “¿a quién no le va a afectar estar recibiendo constantemente correos de rechazo, estar en procesos, estar en la recta final y recibir un correo de que no pasaste? Eso para mí es lo más cansado, mentalmente y emocionalmente hablando”.
Te puede interesar
Este proceso, de aplicar y aplicar y no recibir respuesta, afirma que es agotador. Una etapa de desgaste en la que, denuncia, también es difícil que las empresas “sean responsables”. ¿A qué se refiere? Jimena explica que, a menudo, las empresas o reclutadores no se toman el tiempo de decirle al candidato que no ha sido seleccionado y los motivos por los que lo han descartado. Aunque no es el único problema que ve en las empresas.
“Las empresas quieren al candidato perfecto y, perdón, pero no lo van a encontrar”
Parte de la crítica de Jimena incide en que las empresas suelen ser demasiado exigentes a la hora de establecer los procesos, solicitando demasiados requisitos sin prestar importancia a la actitud del candidato y lo que está dispuesto a aprender o dar a la compañía. “Las empresas están pidiendo demasiada experiencia, demasiados requisitos, y quieren al candidato perfecto y perdón, pero no lo van a encontrar”, señala al respecto.
En esta línea, continúa explicando que “podrás ser la persona perfecta, podrás haber hecho todo. Y si un requisito no lo tienes, te van a rechazar”, asegurando que es algo que ha podido comprobar ella misma. Por el lado empresarial, indica que entiende que las empresas “no pueden contratar a quien sea si no cumplen los requisitos”, pero lo que no entiende es “por qué si una persona cumple con la mayoría de las cosas, no puedes enseñarle lo que le falta”.
Sobre esto último, recalca que “si tiene la actitud para hacerlo, de verdad estoy segura que probablemente te va a hacer un mejor trabajo. Y es que literal, lo único que necesitas, siento yo, aparte de cierto conocimiento, es actitud. Si tienes la actitud por hacer las cosas, las vas a hacer. Si tienes ganas de demostrarle a la gente de lo que eres capaz, lo vas a hacer. Por lo tanto, ellos van a tener buenos resultados”, expresa para compartir su frustración.
“Sé que no soy la única y por eso lo comparto, para que sepas que no eres el único que se siente así y también porque estoy cansada. Estoy cansada de sentirme un fracaso porque no estoy trabajando. Estoy cansada de sentir que no sé nada porque me están rechazando las empresas. Estoy cansada de sentir que los 3 años y pico que llevo de experiencia laboral, los 3 años y pico que estuve tratando de aprender, tratando de dar lo mejor de mí en las empresas en las que estuve, no valió la pena porque ahora nadie quiere contratarme”, manifiesta, en un claro testimonio de la factura que puede pasar, especialmente a nivel mental, no encontrar trabajo.