Todos tenemos clara la importancia del ahorro. Sin embargo, de ahí a ahorrar todos los meses hay un trecho bastante amplio. Más de la mitad de los españoles no supera los 50 euros de ahorro al mes y no porque no quieran, sino porque no pueden o no saben cómo hacerlo. Para ponerle solución, el experto en finanzas David Delisle explica su método para ahorrar… sin usar la tarjeta.
Un David Delisle, autor del libro The Golden Quest: Your Journey to a Rich Life ('La búsqueda del oro: Tu viaje hacia una vida rica'), que compartió su experiencia a través de esta estrategia, la cual le permitió reducir a la mitad sus gastos mensuales en apenas 30 días.
Dejar la tarjeta y pagar con billetes ayuda a cuestionar cada gasto y a crear hábitos financieros más conscientes, según David Delisle
Como compartió con el portal británico de Best Life, el experimento no estuvo exento de retos, especialmente por las facilidades que ofrecen las tarjetas. Delisle reconoció que pagar en efectivo era "un dolor de cabeza" debido a la incomodidad de manejar billetes y monedas.
De todos modos, el experto destaca que ha sido esa pequeña incomodidad la clave para transformar su relación con el dinero. “El acto de contar billetes y recibir cambio hacía que las compras fueran menos automáticas y más reflexivas”. Además, observar cómo el dinero físico desaparecía de su cartera le generaba un impacto visual que las transacciones con tarjeta no ofrecían.
David Delisle descubrió que el uso habitual de las tarjetas le permitía gastar sin una percepción clara del dinero real que estaba destinando a cada compra. El acceso al plástico, además, lo llevaba con frecuencia a consumir productos o servicios que no eran necesarios.
“Contar billetes y recibir cambio hacía que las compras fueran menos automáticas y más reflexivas”
Claro que el plan no consistía en eliminar completamente la tarjeta de crédito, pues algunos pagos obligatoriamente deben hacerse de forma digital. Aun así, cada vez que pudo, eligió el efectivo durante un periodo de 30 días.
No obstante, el resultado de dejar de usar tarjetas durante un mes fue muy positivo para David. Y es que, con este cambio, el experto consiguió cambiar de opinión a la hora de realizar compras no planificadas y, por ello, logró reducir sus gastos: "Me sorprendió la cantidad de cosas en las que gastaba dinero sin rumbo fijo y sin darme cuenta”.
El uso de tarjetas crea el espejismo de que gastar no tiene un coste inmediato. En cambio, pagar en efectivo hace que cada transacción sea tangible y visible. "El dinero en efectivo hace que esas compras sean un poco más difíciles y te da un poco más de tiempo para reflexionar sobre tu decisión", aseguró Delisle. Ese tiempo extra lo ayudó a cuestionarse en varias ocasiones si realmente necesitaba lo que estaba a punto de comprar.
Con esta experiencia, Delisle dice que ha aprendido a incorporar el uso de efectivo siempre que sea posible como una herramienta para fomentar una mayor consciencia financiera. “Simplemente empezar es lo más difícil”, recomendó para quienes quieran intentar un desafío similar. “Después de unos días, se convierte en un hábito y empiezas a ver cómo tus gastos cambian”, finaliza.
Otro truco entre los muchos para ahorrar dinero es vigilar en qué se nos va el sueldo. Tiene que llegar un día en el que nos sentemos a revisar todos nuestros gastos. Solo así podremos ver los que han podido ser un capricho y nos lo podemos ahorrar de cara a otros meses. Luego, dentro de los gastos que son diarios hay que hacer un estudio para ver en qué podemos ahorrar. Revisar cuántas suscripciones tenemos, por ejemplo, y el precio de cada una, ver las facturas fijas de luz y gas y revisar tarifas deberíamos hacerlo una vez al año para no pagar más de la cuenta.