Si hemos superado los 30 e incluso los 40 años, es posible que durante tu infancia pasaras horas jugando con tu videoconsola a un montón de videojuegos de la época. ¿Eres de los que conserva sus recuerdos? ¿No te deshiciste nunca de tus videojuegos favoritos? Pues puede que tengas, sin saberlo, hasta 4.000 euros con alguno de ellos, como el Zelda Majora's Mask para Nintendo 64 .
En un reportaje del diario británico del Daily Mail, se explica que hay muchos videojuegos antiguos que hoy en día, en 2025, están realmente cotizados, especialmente por parte de los coleccionistas que buscan siempre hacerse con piezas que perduran en el tiempo.
Los coleccionistas llegan a pagar 4.400 euros por el Zelda Majora's Mask para Nintendo 64
Ya hace años Tim Weeks, subastador y especialista en juguetes en Wessex Auction Rooms y reconocido experto en el tema, explicó que hay algunos títulos que son capaces de renacer después de 20 o 30 años para tener una presencia cada vez más fuerte en el mercado retro.
El experto decía que su casa de subastas a menudo recibe consultas de personas interesadas en saber si su videojuegos podrían generar algo de dinero. "Mi consejo es siempre el mismo: 'no los tires, llévalos a una subasta. Puede que te lleves una agradable sorpresa'", decía.
"Si bien los videojuegos que baten récords y aparecen en las noticias suelen ser ejemplares nuevos y sellados, el tuyo no tiene por qué serlo. Desde Nintendo hasta Sega y desde Sony hasta Atari, todos tendrán valor incluso sin las cajas en muchos casos", mantenía.
“Mi consejo es siempre el mismo: 'no los tires, lleva los videojeugos a una subasta. Puede que te lleves una agradable sorpresa”
Hoy en día muchas son las compañías cuentan con los coleccionistas desde hace mucho tiempo, sirviendo ediciones exclusivas para ellos y gran cantidad de merchandising asociado. Por su parte, el coleccionismo de juegos retro no ha dejado de crecer, llevando a algunos títulos a alcanzar cifras de venta astronómicas.
Y esto es justo lo que ha pasado en este momento pues, según la elaboración del Daily Mail, ha videojuegos como el Zelda Majora's Mask (Adventure Set), para Nintendo 64, que hoy en día tiene un valor de unos 4.400 euros. Esta edición, que es de los más buscada por los coleccionistas, tiene 25 años. También hay otros como Snowboard Challenge, para la consola NES, con la que llegan a pagar alrededor de 3.500 euros.
El único requisito es que se conserven bien y que se tenga su caja original
"La mayoría de los jugadores abrieron sus juegos nuevos, los jugaron sin parar y nunca se les pasó por la cabeza conservar las cajas en las que venían", explica Currys, experto en videojuegos retro. Por lo que, para aquellos que sí lo hicieran, que sí conservaran las cajas de estos videojuegos, esa decisión podría hacer que tengan en sus manos miles de euros con estas piezas. Como recoge el reportaje del mencionado periódico inglés, estos son otros videojuegos que, en caso de tenerlos (y conservarlos bien), pueden hacer que los coleccionistas nos paguen verdaderas fortunas.
- Zelda Majora's Mask (Adventure Set) para Nintendo 64: 4.400 euros.
- Snowboard Challenge para NES: 3.500 euros.
- Mega Man X3 para Super Nintendo: 2.900 euros.
- Zelda Oracle of Ages & Seasons Edición Limitada para GameBoy Color: 2.700 euros.
- Darxide para Mega Drive 32X: 2.660 euros.
- Colección completa de Grand Theft Auto para PlayStation 2: 2.650 euros.
- Mr. Gimmick para NES: 2.500 euros.
- Duck Hunt (Game of Variant) para NES: 2.400 euros.
- Dark Souls III (Edición Prestigio) para PlayStation 4 : 2.350 euros.
- Starcraft 64 para Nintendo 64: 2.000 euros.
Con todo, y también gracias a la repercusión de las redes sociales más allá de las reglas de la oferta y demanda y de cómo el mercado del coleccionismo ha ido evolucionando, son muchos los que en la actualidad han hecho de esta afición no solo una moda, sino un complemento para su vida.
Desde bibliotecas digitales a servicios de suscripción, el formato físico ya no es el único medio para acceder a los videojuegos. No obstante, el coleccionismo es una afición que no ha pasado de moda, las redes sociales y los creadores de contenido han servido para ayudar a que muchos nuevos coleccionistas se sumen a esta veterana afición.

