¿Por qué La Caixa le ha cobrado 60 euros de comisiones?

Si no has sido uno de los 14 millones de clientes que no ha tenido que pagar comisiones este pasado sábado, 30 de abril, es posible que te puedas encontrar un cargo inesperado en la cuenta bancaria. Pero hay una explicación para ello: el no cumplir los requisitos para librarte de los recargos que imponen los bancos a algunos usuarios por utilizar determinados servicios y que no paran de crecer (el INE lo cifra en el 10,6%) desde 2019 por el nuevo y restrictivo contexto financiero y económico al que se han visto sometidos los bancos y los cambios de política de la eurozona.
 
En el caso de CaixaBank, son 60 euros los que se han cobrado. Es la cuota trimestral impuesta en los meses de enero, abril, julio y octubre a los usuarios que están adscritos al programa ‘Día a día’ y que no cumplan con una serie de condiciones. El importe, según estas, puede varias de los 15 a los 60 euros. Por lo que, a final de año, la factura por el pago de comisiones puede dispararse hasta los 240 euros.
 
Entre los tipos de comisiones se encuentran varias. Las de mantenimiento de la cuenta corriente, de las más caras y que se debe pagar solo por tener una cuenta abierta; la administrativa, cada vez que se realiza un movimiento como pagar con tarjeta o hacer una transferencia y que suelen rondar los 60/70 céntimos; y por tener tarjetas, que suele ser una cuota anual de 36 euros de emisión y mantenimiento por la tarjeta de débito y más de 40 por la de crédito. Incluso se ha visto por hacer transferencias, con un tanto por ciento sobre el dinero transferido o con un mínimo. 

¿Cómo dejar de pagar comisiones en La Caixa?

El primer paso es consultar al banco las posibilidades para dejar de hacerlo y las opciones que ofrece. Entre ellas, contratar otro tipo de producto bancario o financiero, como son los planes de pensiones, los fondos de inversión o los seguros. Una alternativa que no encaja con todos. ¿Qué hay de los que disponen de menos recursos? Los que no tengan nómina domiciliada o no llegue a los 600 euros, al fin y al cabo, son los más penalizados. Y estos son los que se suelen librar de las comisiones.
 
La otra alternativa consiste en cerrar la cuenta en dicha entidad bancaria y buscar otra para beneficiarnos de estas mencionadas bonificaciones con las que obsequian a los clientes nuevos. Pero hay que tener en cuenta también los requisitos de permanencia. La letra pequeña. Ante ellas surgen distintas alternativas como ‘cero comisiones’, como la Cuenta Clara del banco ABANCA, la Cuenta Online de BBVA, la Cuenta Nómina de ING o la Cuenta Corriente Open de OpenBank. Incluso algunas con regalos en forma de dinero.
 
Concretamente, en La Caixa, o CaixaBank, hay otra opción si no se está en condiciones de cumplir con los requisitos de su cuenta ‘Día a día’: domiciliar una nómina de al menos 600 euros o una pensión de 300 euros como mínimo o bien tener más de 20.000 euros en productos de inversión. Además de pagar tres recibos domiciliados al trimestre o hacer tres compras con tarjeta de crédito cada tres meses.
 
ImaginBank es la alternativa. Hablamos de su banca digital, que es gratuita y no tiene gastos de mantenimiento para sus clientes sin importar el grado de vinculación. Es decir, que no cobra comisiones de mantenimiento ni por las tarjetas ni hace falta, para ello, domiciliar una nómina, recibos ni mantener un saldo mínimo.