Las monedas de 25 pesetas por las que pagan hasta 600 euros: revisa bien tus bolsillos

Las pesetas desaparecieron con la llegada del euro en enero de 2002 dejando de lado las tradicionales monedas de cinco duros, cien pesetas o las llamadas rubias (1 peseta). El Banco de España anunció que recogería el dinero antiguo en metálico, tanto monedas como billetes, hasta junio de 2021. Pero no se han entregado todas, y en los cajones de las casas aparecen ejemplares con gran valor en el mercado numismático.

Estas monedas especiales son muy apreciadas por los coleccionistas que acuden a las subastas con la esperanza de descubrir algo diferente: errores o taras en la acuñación, ejemplares únicos en perfecto estado o ediciones especiales, como la que se realizó hace poco tiempo en honor a la princesa Leonor. Pero, sobre todos estos (por cantidad, antigüedad e historia) destacan las monedas de 25 pesetas.

Y es que esta moneda ha pasado por diferentes fases y ha vivido en primera persona momentos históricos como la dictadura o la transición. Ha llevado el busto de Franco (la de 1957 es de las que mejor se pagan), del Rey de España Juan Carlos I (padre del actual monarca Felipe VI) con mención especial al Mundial del 82 y otra que es muy especial porque lleva una rareza caligráfica, en la que aparecen los toros de Castilla y León. Pero ¿qué monedas de 25 pesetas son las que valen más dinero?

Monedas de 25 pesetas que valen un dineral

Lo primero que debe quedar claro es que el precio de las monedas de 25 pesetas cambia en función de la subasta, el momento en que se presente a la venta y si tiene algún defecto bien en el canto o en la leyenda que la convierte en única. En este último caso, una moneda antigua de 5 duros puede valer un pastizal.

Moneda de 25 pesetas de 1980: pagan 500 euros

La moneda de 1980 acuñada con motivo del Mundial de fútbol del 82 celebrado en España (el de ‘Naranjito’) es la que vale más dinero. En una de las caras, en la anterior, aparece el perfil del Rey Juan Carlos I (padre del actual monarca, Felipe VI).

En el envés (la parte trasera) está grabado un balón de fútbol sobre una red. Lo que la convierte en muy atractiva para los coleccionistas es que actualmente quedan pocos ejemplares, por un lado, y que al ser conmemorativa de un evento deportivo se convierte en única. En el portal eBay la venden por 600 euros.

Moneda de 25 pesetas de 1995: tiene una rareza única

La moneda de cinco duros acuñada en 1995 tiene una rareza que la convierte en única. Por eso, pagan 100 euros por pieza siempre y cuando en la inscripción ponga ‘Castilla León’ y no aparezca la preposición 'y'. 

Como característica especial, hay que resaltar que es de color dorado y tiene el agujero en el centro. Una modificación de la tradicional (plateada) que la convirtió en muy especial en aquellos años. Si se suman estas dos cosas, el diseño y el error tipográfico, aparece un metal único y bien pagado por los numismáticos y coleccionistas.

Moneda de los Juegos Olímpicos de Barcelona: muy valorada

En la mente de todos los españoles está la celebración de los JJOO en Barcelona. Con motivo de este importante acto, se acuñó una moneda especial en 1992. Lleva el agujero en el centro, es de color dorado y muy buscada por los amantes de las colecciones. En buen estado cuesta unos 100 euros si se busca en las webs de segunda mano como eBay o Etsy.

Moneda de 25 pesetas de Franco: 450 euros

La moneda con el rostro del dictador Francisco Franco fue acuñada en 1957, en medio del Régimen. Lleva en la cruz el águila de la bandera de aquella época y el lema ‘Una, grande y libre’. Es una de las ediciones con menos tirada, lo que hace que su precio llegue a 480 euros en las apps, subastas y webs de segunda mano especializadas. 

Moneda de cinco duros de Melilla: más de 500 euros

Una joya para los amantes de la numismática, la moneda de 25 pesetas del año 1997 es de las más demandadas. Fue de las últimas que se acuñaron antes de que llegase el euro a España. Es original ya que se originó en Melilla y simboliza el final de la peseta, por lo que es muy valorada por los sentimentales. 

En el mercado de segunda mano, se venden por más de 500 euros, siempre y cuando se encuentren en buen estado de conservación.