La vivienda en España se ha disparado tanto que muchos jóvenes ya olvidan la idea de comprarse un piso y ven otras alternativas como las casas prefabricadas. Pero hay otros que van más allá y deciden vivir de otra forma. Este es el caso de José Antonio, un joven funcionario gaditano, decidió que no iba a esperar más y con su sueldo de 1.300 euros y sin la posibilidad de pagar un piso a decidido optar por la solución de vivir en una furgoneta.
“Es imposible alquilar algo en Cádiz con mi sueldo”, explica en un vídeo publicado en su perfil de TikTok, donde muestra su día a día y que recoge la cadena Telecinco. Su solución ha causado sorpresa y debate, pero él lo resume con una frase contundente: “Dime en qué piso me meto pagando 700 euros al mes”.
Un hogar de dos metros cuadrados
El joven vive en una Volkswagen T5 adaptada como vivienda. No tiene hipoteca, ni factura de luz, ni agua, pero lo que sí tiene es lo imprescindible para pasar el día a día, es decir una pequeña nevera, un congelador, espacio mínimo para ropa y enseres, un depósito de 70 litros de agua y hasta un WC seco y una ducha. Todo distribuido en forma de L, para aprovechar cada rincón.
“Vivo en dos metros cuadrados, en una furgoneta de dos plantas”, cuenta mientras enseña el interior. La estética recuerda a las clásicas camperizaciones, pero con un enfoque mucho más práctico que aspiracional. Nada de viajes de aventura, ya que se trata de poder vivir solo, aunque sea renunciando a un hogar convencional.
Aunque el espacio es reducido, asegura que tiene lo necesario. “No pago alquiler y eso, hoy en día, ya es mucho”, reflexiona.
“No estoy normalizando la pobreza. La realidad es que somos pobres”
Su decisión ha generado un fuerte debate en redes sociales. Algunos ven en su estilo de vida una alternativa ingeniosa; otros, una señal más del deterioro económico que sufren los jóvenes. Él lo tiene claro: no pretende romantizar nada.
“Me está cayendo mucho odio”, reconoce. “Dicen que normalizo la pobreza. Pero la realidad es que somos pobres. Soy funcionario, gano 1.300 euros y no puedo permitirme un piso en mi ciudad”.
Según los datos más recientes del mercado inmobiliario, Cádiz registra algunos de los precios de alquiler más elevados de Andalucía, con medias que superan los 10 euros por metro cuadrado. Para jóvenes con salarios modestos, el margen entre vivir y sobrevivir es cada vez más estrecho.
Mostrar que otra forma de emanciparse es posible
Pese a las críticas, José Antonio insiste en que su decisión ha sido liberadora. Ocho meses después de mudarse a la furgoneta, afirma que “ha sido la mejor decisión” que ha tomado. Forma parte del 15 por ciento de jóvenes que ha logrado emanciparse, aunque sea de una forma poco convencional.
En sus vídeos muestra cómo organiza su día a día, cómo afronta el calor o el frío, y cómo adapta su vida a un espacio móvil. Su objetivo no es que todos sigan su ejemplo, sino mostrar que la realidad obliga a buscar soluciones que hace unos años habrían parecido impensables. “Muchos no lo ven viable, pero yo sí. Solo quiero enseñar cómo vivo, nada más”, concluye.

