El Congreso de los Diputados ha rechazado la proposición de ley presentada por Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), partido de Gabriel Rufián, con la que se pretendía gravar con un impuesto progresivo a partir del 4% a quien comprase una tercera vivienda o más. Basándose en la acumulación de bienes inmobiliarios con uso residencial, la formación catalana propuso un gravamen que aumentaría del 4% al 8% y al 12% entre la tercera y la quinta vivienda, con un 5% adicional por cada inmueble de más.
Durante su intervención en la Cámara Baja, Rufián ha dejado claro que la vivienda es el “principal problema del país” porque se necesitan “hasta 59 años de sueldo para acceder a un piso de 60 metros cuadrados, si el pan hubiese subido lo mismo que la vivienda, estaríamos hablando ahora de que una barra costaría unos 13 euros”.
Además, ha recordado que “el 45% de las personas que pagan un alquiler son pobres” y que el mercado es “un refugio inversor para los ricos del mundo, quien quiera ganar dinero con casas, que pague”.
PP, Vox y Junts votaron en contra de la medida: “es un despropósito”
Para el Partido Popular (PP) de Alberto Núñez Feijóo, la propuesta de ERC no es factible, como señaló el diputado Raúl Cuevas. Además, destacó que se trata de una idea con base ideológica y que supondría “una subida masiva de impuestos” y “un castigo al ahorro y la inversión”. Por su parte, el portavoz de Vox, Carlos Hernández apuntó que “no aborda ninguna de las causas que dificultan el acceso a la vivienda y es como tratar una neumonía con caramelos de la tos”.
Por parte de Junts, Marta Madrena señaló que este impuesto no haría otra cosa que “sobrecargar a los propietarios castigando la ampliación de la oferta” y la portavoz del PNV, Idoia Sagastizabal avisó de que podría tener “efectos perversos” provocando “la retirada de viviendas del mercado”.
Los socios de izquierda aplauden la proposición de ley
Por el contrario, los socios de izquierda del Gobierno, Bildu, BNG, Podemos y Compromís respaldaron la admisión a trámite. El portavoz de Vivienda de Sumar, Alberto Ibáñez,aplaudió la intención del texto. “Con el panorama actual, lo que hay que hacer es achicharrar a impuestos a los rentistas”.
El PSOE aunque no comprometió su apoyo, aseguró que la propuesta de ERC “va en línea” con el trabajo en materia de vivienda que está desarrollando el Gobierno, ya que está centrado en la promoción de oferta pública y una contención de los precios.
La iniciativa no pasó el primer examen parlamentario pero sirvió para abrir de nuevo el debate sobre cómo gravar la acumulación de vivienda en manos de los grandes propietarios en un momento en que el mercado inmobiliario está en tensión.
