España, al igual que otros países, condena la discriminación por razón de edad o enfermedad, siendo muchos los casos en los que se ha declarado nulo el despido de un trabajador o trabajadora por el simple hecho de ser ya empleados de avanzada edad o por haber estado de baja o enfermos. Esto le ocurrió a un director de seguridad de 57 años, quien fue despedido por haber sufrido un infarto y tener, según la empresa, edad ya para jubilarse.
El caso ocurrió en EE.UU, trabajando el hombre para Maximum Security NYC Inc., una empresa con sede en Queens (Nueva York), tal y como se recogía en la demanda presentada por la Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo de Estados Unidos y se hizo eco el diario ‘Miami Herald’.
Fue en diciembre de 2020 cuando el empleado sufrió un infarto durante su turno de trabajo y fue hospitalizado, según la Comisión. Este trabajaba en hoteles como director de seguridad contra incendios y era responsable de ayudar a los bomberos a evacuar a los huéspedes en caso de que se produjera un incendio o emergencia.
Ahora, cuando se reincorporó al trabajo después de superar el infarto, se encontró la desagradable sorpresa: “su supervisor le dijo repetidamente que debería jubilarse dada su edad y su ataque al corazón, y luego lo despidió explícitamente por las mismas razones”, expuso la Comisión.
Discriminación por razón de edad y discapacidad
La agencia federal acusó a la empresa, Maximum Security, de discriminación por edad y discapacidad al despedirlo. Y, finalmente, llegaron a un acuerdo con la compañía, debiéndole pagar al trabajador unos 22.500 dólares en concepto de daños y perjuicios, que actualmente equivaldría alrededor de 19.400 euros.
“La discriminación por edad y discapacidad es injusta e ilegal”, afirmó Daniel Seltzer, abogado de la Oficina del Distrito de Nueva York de la Comisión, añadiendo que “un empleador no puede basarse en estereotipos o temores para negar a los empleados la oportunidad de trabajar”.
Además, la discriminación por edad viola la Ley contra la Discriminación por Edad en el Empleo, mientras que la discriminación por discapacidad viola la Ley de Estadounidenses con Discapacidades.
Junto a la indemnización, la empresa debía publicar una nueva política contra la discriminación e impartir formación contra la discriminación a sus empleados. Asimismo, el acuerdo recogió establecer “sanciones severas contra la discriminación por motivos de edad o discapacidad y el almacenamiento inadecuado de los historiales médicos de los empleados”.

