En una sociedad donde el valor del trabajo y el esfuerzo parecen estar cada vez más en cuestión, el debate se centra en cuáles son las verdaderas claves del éxito. Frente a quienes minimizan la importancia del compromiso, existen personas reconocidas que reivindican la necesidad de recuperar estos valores para alcanzar el éxito.
La Universidad de Almería recibió el pasado viernes a Toni Nadal, exentrenador y tío del 22 veces campeón de Grand Slam, Rafa Nadal, dentro del ‘Foro Líderes’ enmarcado en la ‘Jornada Empresarial Human&Business 2025’, ya que, en los últimos años, se ha consolidado como una voz experta en cuanto a valores de liderazgo. A través de su conferencia sobre cómo alcanzar el éxito, Nadal ha compartido algunas de las experiencias vividas durante su etapa como entrenador, subrayando la importancia de mantener la motivación y la capacidad de superación incluso ante las dificultades.
La fórmula del éxito: carácter antes que talento
Toni Nadal, que durante más de dos décadas moldeó la mentalidad y manera de trabajar de Rafa Nadal hasta convertirlo en uno de los mejores deportistas de la historia, explicó que la clave de cualquier logro pasa por la exigencia personal. “Lo que te da más opciones de éxito en la vida es la formación del carácter”, aseguró el técnico mallorquín a NoticiasTrabajo, haciendo hincapié en su modelo de trabajo, antes de comenzar la conferencia.
“Yo fui un entrenador que busqué el éxito profesional a través del desarrollo personal”, añadió, porque, no se trataba únicamente de ganar partidos, sino de construir la resistencia mental necesaria para sobreponerse a la frustración y al fracaso, algo que cada vez se tolera menos en la sociedad actual.
Una sociedad que rehúye del esfuerzo
El mensaje de Toni Nadal resonó, especialmente, en el contexto de los retos actuales que afrontan tanto el mundo universitario como el empresarial. Teniendo en cuenta que España mantiene una de las tasas de desempleo juvenil más altas de la Unión Europea, el discurso del entrenador pone el acento en la necesidad de reivindicar valores que resultan imprescindibles para afrontar la competitividad del mercado laboral actual.
“A mí me gusta el trabajo, y me extraña que hoy vivamos en un país donde parece que trabajar está denostado”, lamentó Nadal, aunque no dudó en cargar contra ciertos discursos políticos y sociales que han contribuido a desvirtuar la importancia del trabajo. “Para algunos en este país parece que el trabajo es un castigo del Señor”, añadió insistiendo en que el esfuerzo y la dedicación “son lo que realmente dan sentido a la vida y permiten construir una sociedad mejor”.
Así, el entrenador se preguntó en tono preocupado por la tendencia que hay entre los españoles, que refleja la falta de competitividad y exigencia en el mundo laboral. “Desgraciadamente, la gente de hoy en día, no sé si es porque cae antes en la frustración, pero no suele ir al límite”, señaló.
Del liderazgo al tenis actual: Alcaraz y Sinner
Aunque el eje de su intervención fue el liderazgo y la cultura del esfuerzo, Nadal no pudo evitar referirse a la actualidad del tenis. Y lo hizo con un elogio a la gran figura emergente española: “Carlos Alcaraz es un jugador extraordinario que tiene todas las condiciones para estar entre los mejores de la historia, y está cercano a ello”.
Sin embargo, apuntó que Alcaraz contaba con una ventaja que no tenían los jugadores de la generación anterior. “Ellos competían contra una inmensa mayoría de rivales que iban al límite cada partido, como Ferrer, Murray, Wawrinka, Del Potro… Mientras que hoy en día, los perseguidores de Sinner y Alcaraz muchas veces vemos que no dan la talla”, concluyó el entrenador haciendo referencia a la “menor competencia que tienen entre ellos”, lejos de quitar ningún mérito a los tenistas del panorama actual.

