Los vigilantes de seguridad privada cobrarán un 16% más

Nuevo logro para los vigilantes de seguridad privada. Estos trabajadores verán incrementado su sueldo un 16% durante la vigencia del convenio. Es decir, durante los años 2023 y 2026. Una subida salarial fruto del acuerdo entre la Asociación Profesional de Compañías Privadas de Servicios de Seguridad (Aproser), la Asociación Española de Compañías Privadas de Seguridad (Asecops) y los sindicatos UGT, CCOO y USO.

Este incremento se efectuará de forma progresiva: un 6% en 2023, un 4% en 2024, un 3% en 2025 y un 3% en 2026. Además, se aplicará en todos los conceptos salariales y categorías profesionales del convenio estatal de empresas de seguridad: no solo afectará al salario base, sino también a los pluses, la antigüedad o las horas extras. 

Traducido en cifras, como ha explicado el Responsable Estatal de Seguridad Privada de UGT, Diego Giraldez, a ‘Noticiastrabajo.es’, de media aumentará el salario de los trabajadores más de 100 euros mensuales ya el próximo año, en 2023. Según las estimaciones del sindicato, la medida afectará a más de 100.000 personas del ámbito de la seguridad privada y “dará certidumbre” a un sector dentro de un contexto económico y social tan convulso como el actual. 

De hecho, como han resaltado desde el sindicato, se ha logrado situar los incrementos salariales “mucho más allá de la media que se está alcanzado en la actualidad en los convenios colectivos”. Actualmente, esta media en los convenios está girando en torno al 2,5%, “debido a la cerrazón de la CEOE”. En lo respectivo a esta subida salarial, también se ha conseguido incorporar una cláusula de garantía salarial de un 2% de incremento adicional al final de la vigencia del convenio colectivo, que irá acorde a los registros que marque la inflación. 

Modificación de la incapacidad temporal 

El acuerdo alcanzado entre las asociaciones representantes de la seguridad privada y los sindicatos también recoge una modificación de la incapacidad temporal (IT) en dos tramos específicos. En concreto, estos son los cambios alcanzados: 

• Entre el tramo del 4 al 20 se complementa la situación de IT hasta la tercera incapacidad sufrida en un mismo año. A partir de ese momento, para la persona trabajadora se aplicará el régimen establecido en Seguridad Social.
• En el tramo del 91 al 100 se incrementa la prestación para los trabajadores que se vean afectadas en esta franja de incapacidad de larga duración. El objetivo es que las incapacidades temporales de larga duración queden más protegidas, sobre todo teniendo en cuenta de que se trata de un colectivo donde la media de edad es de 52 años.

De ese modo, como ha destacado UGT, se ha quitado de la mesa la pretensión de la patronal de eliminar parte de los tramos de incapacidad temporal. También se ha eliminado la congelación de antigüedad, algo que ponían recurrentemente sobre la mesa las empresas. En palabras de Diego Giraldez, se ha primado la incapacidad temporal de larga duración “ligada a la edad avanzada del sector en su conjunto, que de media supera los 52 años”. 

Creación de una mesa de anticipación al cambio 

“Hemos creado por fin la mesa de anticipación al cambio. Una mesa donde UGT ya está trabajando en Europa y que viene vinculada a los retos tecnológicos del futuro que, sin duda, afectarán al personal de seguridad privada”, declara el responsable estatal. El objetivo es establecer mecanismos que pretendan llevar a cabo “una concertación donde ese impacto tecnológico no influya negativamente sobre el empleo del sector”. 

Dentro de este marco, destaca la incorporación de nuevas categorías profesionales. Se trata de perfiles que responden a actividades que, a día de hoy, se están desarrollando en España y de las que se espera un crecimiento en los próximos años. “Son puestos de trabajo vinculados al personal de sistemas, con la tecnología, que en la actualidad ya se están desarrollando”.