La Generación Z hace ‘ghosting’ a sus jefes y un 87% no se presenta a su trabajo el primer día

La complicada situación a la que se enfrentan los jóvenes en el mercado laboral sigue estando de actualidad. No hay más que analizar los datos del paro para darse cuenta de que la Generación Z (nacidos a partir de 1995) lo tiene complicado para acceder a una vacante. Pero, cuando la consiguen, un estudio realizado por Indeed demuestra que el 75% tiene comportamientos contrarios a lo que cabría esperar de un buen empleado.

Estos pasan por ignorar a sus jefes, e incluso hacer ‘ghosting’ laboral y no presentarse en sus puestos de trabajo. De hecho, el 93% de los trabajadores de la Gen Z ignoran las indicaciones que reciben para hacer bien su trabajo. La muestra que ha tomado el conocido portal de empleo es de 1.500 trabajadores que estaban contratados en 1.500 negocios de Reino Unido. Aunque estos comportamientos no son exclusivos de los ingleses y se podrían aplicar fuera de ese mercado. 

Te puede interesar

La Generación Z necesita jornadas de trabajo de más de 40 horas para crecer laboralmente pero no saben cuándo parar

Aunque, en buena parte, no es culpa directamente de los jóvenes de la Generación Z que ven cómo a diario aumenta el coste de la vida. Esto trae como consecuencia no poder trabajar en determinados puestos que requieran desplazamientos, simplemente porque no pueden permitirse pagar desplazamientos y alojamiento.

Así funciona el ‘ghosting’ laboral de la Generación Z

Una vez que los jóvenes Gen Z han conseguido superar el proceso de selección de personal en las empresas y les han dado el puesto de trabajo, el 87% decide desaparecer. Esta tendencia, conocida como ‘ghosting laboral’, consiste en no presentarse en sus empresas el primer día o desaparecer para no regresar más.

Esto no es nuevo. Se ha visto en otras generaciones como la X, Y y en mucho menor grado, en los baby boomers. Pero es ahora, con la ayuda de las redes sociales como Facebook, X o Tiktok cuando esta actitud es más popular.

Te puede interesar

La Junta de Andalucía eliminará el teletrabajo de los funcionarios si los resultados no son positivos: “si lo confundimos con vacaciones, no vamos a jugar”

Lejos de pedir perdón o regresar con excusas, los empleados más jóvenes se muestran orgullosos, como señala el estudio y publica la web 3djuegos. De hecho, llama la atención que el 56% de los jóvenes no está arrepentido, y apuntan que podrían hacerlo de nuevo.

Porque el problema, según el estudio de Indeed no está en esta actitud negacionista del trabajo, sino en que el 31% cree que es una buena estrategia laboral y el 28% considera la posibilidad mientras está dentro del proceso de selección.

No ir a trabajar como protesta por los sueldos bajos

Analizando los motivos que mueven a los más jóvenes a modificar su comportamiento laboral, se encuentra en primer lugar que es una actitud que emplean como protesta ante los bajos salarios, o las malas condiciones referentes a los horarios y turnos. Aunque, simplemente, podría deberse a una falta de motivación.

El estrés que impone a un joven que acaba de acceder al mercado laboral encontrarse bajo las órdenes de un jefe e incluso de los compañeros más veteranos también pueden llevarle a desaparecer. 

Sobre las explicaciones que dan a las empresas, muchos de los encuestados matiza que en muchos casos sus empresas han estado conformes con una comunicación a través de WhatsApp o teléfono.

Otros medios destacan que la interpretación que se puede dar a esta actitud no es otra que una necesidad de venganza. Antes, eran las empresas las que seleccionaban a los empleados y ahora, los nuevos trabajadores estiman que son ellos los que tienen capacidad de elegir.

Qué soluciones da el mercado laboral al ghosting de los jóvenes

Muchos directivos se plantean cómo dar respuesta al ghosting laboral, y en todos los casos, la solución pasa por replantear el mercado de trabajo y los procesos de selección de personal. 

Lo primero es tener en cuenta que la Generación Z suele ser personal con una alta cualificación, estudios universitarios o Formación Profesional. Este sería uno de los puntos a tener en cuenta. Ante esto, los jóvenes señalan que cada vez hay más ofertas de empleo, pero menos exigentes y que a la hora de seleccionar personal, falta transparencia. 

Todo esto genera un estrés que hace que muchos jóvenes de la Generación Z se planteen si esa empresa es fiable y si deberían volver a enviar el currículum para cubrir futuros puestos de trabajo. 

Lo que aprecian estos jóvenes de aproximadamente 30 años es que los procesos que llevan a cabo las empresas para ampliar plantilla son muy lentos. Y que en muchos casos, terminan con un mensaje en el que se rechaza la candidatura pero donde no aparecen los motivos demasiado claros.