El pasado sábado, RTVE convirtió su plató en un debate sobre trabajo, talento y privilegios con la visita de Eduardo Navarrete al programa ‘Pasa sin llamar’, presentado por Inés Hernand, Alba Carrillo y Mariona Casas, con la colaboración de Carmina Barrios. El diseñador no rehuyó las polémicas y defendió la meritocracia en la moda, criticó el nepotismo y narró un encontronazo en pleno bar con una espectadora que le increpó.
En plena conversación sobre meritocracia, Inés Hernand apuntó que “el ascensor social a veces está un poquito averiado”, en referencia a lo difícil que puede resultar progresar incluso trabajando duro y aprovechó para preguntar al diseñador si la moda es “un mundo muy caníbal” y qué consejo daría a quienes quieren entrar en ella.
Navarrete admitió que es un sector complicado, “como todo”, pero que él es la prueba de que se puede llegar lejos. “Si yo lo he conseguido y yo estoy aquí… Si quieres, puedes”, sentenció antes de soltar su mantra: “el secreto del éxito no es otro que trabajar y echar muchas horas”.
La meritocracia, los influencers y ser “hijo de…”
La charla derivó hacia el papel de los influencers, momento en el que Navarrete recordó un episodio que vivió “tomando unas cervecitas en el 100 Montaditos” y que, según él, fue “muy fuerte”. Una mujer lo señaló diciendo: “Este es el bobo ese que sale en la tele, el influencer que se cree no sé qué”. Él le respondió que era una maleducada, a lo que ella replicó que lo era “desde que nací”. “¿Sí? Pues eres maleducada y fea, las dos cosas”, le soltó el diseñador. “Ahí ya me calentó”, confesó entre risas.
Navarrete insistió en que le encanta que personas con talento, “sin ser hijo de…, sobrina de…”, puedan hacerse un hueco. Una afirmación que provocó la réplica de Alba Carrillo: “Yo discrepo, porque todos los influencers no saben hacer cosas”.
A lo que Navarrete contestó: “No estoy hablando de que todos los influencers sepan hacer cosas”, aclaró, “estoy hablando de la gente que viene sin padrinos”. Aun así, Carrillo continuó su alegato: “Hay gente que viene con padrinos, pero también tiene talento y tiene derecho a estar”.