Diego García es maestro de Educación Infantil en Granada y aunque cuenta con experiencia laboral en varios colegios donde todos han terminado encantados con su trabajo (según explica en el vídeo), ahora que está desempleado y en búsqueda de un puesto de trabajo, denuncia en su canal de Tiktok (@diegogrcia_) una situación que le ha impactado. Y es que, como señala, le han dejado fuera del proceso de selección por ser hombre.
“Quienes me conocen saben que he vivido unos meses muy difíciles de ansiedad y estrés por no tener trabajo de lo mío o en general”. Ha sido un proceso muy duro para él porque “he entregado currículum pero no me ha salido nada”. Por eso, encontró una oportunidad laboral en Atarfe, no se lo pensó dos veces. “Soy maestro de Educación Infantil y soy un hombre… no tengo miedo a decirlo” Al contrario, señala, “me enorgullece porque somos pocos y cada vez menos”.
“Quiero denunciar públicamente una situación laboral que viví en el día de ayer en un centro infantil de Atarfe (comienza el vídeo) pero no voy a decir el nombre por respeto”. Y aunque parecía que “todo iba a ir bien”, esta semana recibió una llamada que dio un giro de 180 grados a sus expectativas profesionales y que ha denunciado en un vídeo que acumula miles de ‘me gusta’.
“No me contratan por ser un hombre”
Cuando ya estaba en el proceso de selección, le llamaron, a lo que él contestó “lleno de esperanza e ilusionado porque parecía que todo iba a ir bien”. Pero nada más lejos de la realidad. “Mi sorpresa fue que no me iba a contratar por ser un hombre”. Las explicaciones que le dieron le sorprendieron aún más. “La directora me dijo que algunos padres y madres, no todos, no ven bien que un hombre desempeñen las labores de cuidado y mantenimiento de sus hijos, ya sea el cambio de pañales, la alimentación, el sueño o la higiene”.
“Me dijo también que en la guardería ya habían tenido algún problema y que su fuera por ella, encantada pero que no podía ser. Y esto puede ser verdad o puede ser mentira, es decir, que pueden ser los padres quienes no lo ven bien o puede ser ella misma a la que no le gusta que un hombre se dedique a esto".
Luego, cuenta que ya tiene experiencia laboral trabajando con niños. “He estado en diferentes colegios realizando sustituciones y siempre he recibido lo mismo en todos los colegios: el amor de los niños y de los padres y mis compañeros”.
“No soy menos válido por ser un hombre y dedicarme a la docencia”
El maestro de Educación Infantil tiene claro que “no me hace menos válido el ser un hombre y dedicarme a la docencia pero se nos llena la boca de decirle a los niños que somos libres en derechos y oportunidades, que no hay cosas de hombre ni mujer, que los colores son todos iguales, pero luego como adultos, no predicamos con el ejemplo”.
Sobre el proceso de selección en el que ha participado, señala que “se hace mal desde el primer minuto. Al aceptar el comportamiento de los padres de no querer contratar hombres, está aceptando la discriminación en este sector y este ámbito (el de la Educación Infantil), está aceptando el machismo de la sociedad y ella misma está siendo cómplice de esto”.
“Me parece muy triste que en pleno siglo XXI pasen estas cosas y me gustaría que este vídeo llegue lo más lejos posible para que los niños tengan una sociedad igualitaria en derechos y oportunidades”, concluye.

