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Dan Colflesh, de 43 años, tras 4 años buscando trabajo: “Tuve que reducir costes con la comida y los niños para aliviar el estrés financiero”

Este hombre es otro caso más de las muchas personas a las que les cuesta encontrar un nuevo empleo después de perder el suyo.

el millennial en su coche
El millennial en su coche |Business Insider
Antonio Montoya
Fecha de actualización:
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Un millennial de 43 años ha estado 4 años buscando trabajo sin suerte, hasta que por fin, después de tener que volver a estudiar y formarse ha conseguido un nuevo empleo, aunque no es el mejor trabajo del mundo. Tuvo que reducir costes en casa cambiando su plan de comidas y los gastos relacionados con el cuidado de sus hijos para reducir el estrés financiero mientras buscaba un nuevo empleo.

Dan Colflesh se encuentra entre los estadounidenses que luchan por encontrar trabajo en medio de una desaceleración en la contratación de trabajadores y es un caso más de aquellos que les cuesta volver a encontrar un empleo tras perder su último puesto. Para conseguir un empleo tuvo que volver a estudiar y completar una licenciatura en la universidad, según cuenta en una entrevista para Business Insider.

Mientras vivía el calvario de estar 4 años buscando trabajo, volvió muchas veces mentalmente a su infancia en la América rural de los Apalaches. Desde joven había aprendido a ahorrar dinero. Así que, cuando la búsqueda se le fue alargando ya de adulto, empezó a idear formas de recortar gastos.

"Es el consejo que te dan cuando creces siendo pobre", dijo. "Si no tienes mucho dinero, no puedes gastar mucho".

Colflesh forma parte del gran grupo de estadounidenses que en los últimos años lo han tenido complicado para encontrar trabajo. Aunque logró ser contratado el año pasado, cientos de personas han compartido con BI sus experiencias: procesos eternos de búsqueda y la necesidad de aceptar empleos peor pagados. Y aunque el paro sigue siendo bajo históricamente, las empresas están incorporando personal al ritmo más lento desde 2013 (si se deja fuera la caída puntual de 2020). Ante este panorama, muchos candidatos se las han arreglado para ajustar sus gastos, reinventar sus estrategias y mantener la motivación.

"Es más fácil no estresarse por encontrar un trabajo si no tienes que estresarte por las finanzas al mismo tiempo", explicó Colflesh, de 43 años, que vive en Massachusetts.

Tuvo que recortar gastos para aliviar la presión económica

Según cuenta, tuvo la suerte de que tanto su esposa como su suegra (con quien conviven) sí tenían empleo, lo que amortiguó parte del golpe económico. Aun así, la familia hizo varios ajustes para reducir el gasto mientras él buscaba trabajo.

Para empezar, compraron un congelador. Esto les permitió comprar alimentos al por mayor y guardar las comidas que él preparaba en grandes tandas; una inversión que, asegura, les saldrá rentable a largo plazo. También montaron un pequeño huerto para cultivar parte de lo que consumen y ahumaron en casa el tocino que compraban, otra forma de abaratar la compra. Además, dejaron de usar uno de los coches familiares y dieron de baja el seguro, algo viable porque Colflesh no tenía que desplazarse a ninguna oficina.

YouTube también fue un aliado: gracias a los tutoriales, pudo encargarse él mismo del mantenimiento básico del vehículo y así evitar visitas al taller. Y, al pasar más tiempo en casa, asumió parte del cuidado de sus hijos, reduciendo así los gastos de guardería. Todo este conjunto de medidas, dice, le quitó un peso de encima durante la búsqueda.

Una mentalidad positiva lo mantuvo en pie

En 2015, cuando tenía 34 años, dejó su empleo en atención al cliente para volver a estudiar, confiando en que eso le abriría más puertas. Seis años más tarde, salió con un título de asociado en física por Holyoke Community College y una licenciatura en ciencias políticas por la Universidad de Massachusetts Amherst.

Sin embargo, reconoce que ese salto académico no le dio el empujón laboral que esperaba y, en cambio, le dejó con préstamos estudiantiles. Aunque llegó a solicitar más de cien puestos, no conseguía avanzar, lo que lo llevó incluso a tomarse un descanso de la búsqueda durante unos meses.

Probó las recomendaciones habituales, desde personalizar el currículum hasta hacer una carta para cada oferta, pero nada parecía funcionar. Finalmente, el año pasado un amigo lo recomendó para un puesto en una empresa tecnológica, donde se encargaría de atender llamadas, programar citas y gestionar solicitudes de soporte. Esa referencia le abrió la puerta a una entrevista y, en mayo de 2024, ya había aceptado la oferta.

"Esto no es realmente lo que estaba buscando, pero está lejos de ser el peor trabajo que he tenido", dijo.

Para no venirse abajo, Colflesh intentó manejar el estrés quedando con amigos, dedicando tiempo a sus aficiones y disfrutando de su familia. Aunque hubo momentos de bajón, se esforzó en mantener una actitud positiva, algo que, según él, fue clave para no rendirse.

"Mantener una actitud positiva debe ser una decisión personal", dijo. "Esperar a que la situación genere positividad probablemente te hará sentir desmotivado y molesto. Sigues adelante porque ¿qué otra opción hay?", recuerda este millennial.