En nuestra vida muchas personas dejan huella, además de los familiares, entre ellas, algunos profesores que, por una razón especial siempre se recuerdan. Ya sea por su vocación, su forma de enseñar y acompañar en una de las etapas más importantes de la vida, permanecen en la memoria. Este es el caso de Marco Faresin, que durante 40 años impartió clases de contabilidad en el Instituto Fusineri de Vicenza.
A sus 92 años, solo tenía un deseo: reencontrarse con sus estudiantes. Y lo consiguió. Cien de ellos, estudiantes de diferentes generaciones, acudieron desde varios puntos de la provincia de Vicenza para celebrar al Profesor Faresin. “Fue uno de los días más felices de mi vida”, aseguró él mismo al diario italiano Leggo. "No se imaginan la alegría que sentí al ver a todos mis antiguos alumnos reunidos", dijo conmovido.
Volver a verlos 50 años después
Entre los asistentes, acudieron algunos que no había visto desde hace cinco décadas, pertenecientes a varias clases que impartió en los 70: “Tengo los días contados, pero nunca olvidaré esta sensación”, añadió con una inmensa alegría tras verlos a todos reunidos.
Muchos estudiantes colaboraron para localizar a antiguos compañeros y hacer realidad el reencuentro el 28 de septiembre. Así, maestro y alumnos se volvieron a ver este día en Villa Lioy, una residencia histórica que Faresin adquirió y restauró y que, esa noche se convirtió en el escenario donde las antiguas relaciones y amistades diluidas en el tiempo, se retomaron.
Los recibió con el mismo cariño de siempre, él sentado tras un escritorio, con traje y corbata, como si volvieran a estar en la escuela de nuevo y los abrazó uno por uno: "Volver a verlos me ha devuelto años y fuerzas", dijo emocionado.
Estos adultos reflejan esas enseñanzas que aprendieron tanto para la escuela como para la vida: "En aquel entonces, no teníamos nada", dice Faresin. "Pero nos las arreglábamos. Hoy, cuando lo tenemos todo, quizás nos falten los valores humanos". Pero enfatiza: "Los encontré todos juntos ese día. Un sincero agradecimiento a quienes me ayudaron a hacer realidad un sueño".