A la hora de recibir una herencia, algunos familiares están exentos de pagar el impuesto de sucesiones o pueden beneficiarse de bonificaciones que reducen considerablemente la cantidad a abonar. Algo parecido sucede en Francia, donde un hombre que cumplía todos los requisitos para heredar gratis el patrimonio de su hermana ha acabado pagando 305.000 euros en impuestos por un descuido administrativo.
Según la información publicada por el medio francés Le Figaro Immobilier, el hombre y su hermana decidieron trasladarse al llegar a su jubilación a una casa que habían heredado de sus padres en el sur de Francia.
Convivieron juntos durante 10 años, por eso, tras la muerte de su hermana, que no tenía hijos, pensó que podría heredar sin pagar el impuesto de sucesiones, acogiéndose a la exención fiscal prevista para hermanos convivientes que recoge el Código General Tributario francés. Pero la administración le denegó dicha exención por un trámite administrativo, y es que su hermana nunca había hecho oficial el cambio de domicilio, algo que en España es motivo de multa.
Un error que costó cientos de miles de euros
La ley francesa establece que los hermanos pueden estar exentos del impuesto si son mayores de 50 años o tienen una discapacidad, son solteros o viudos y han convivido de forma continua con el fallecido durante los cinco años anteriores a su muerte.
A ojos de Hacienda, la hermana seguía empadronada su domicilio anterior de París, lo que hizo que a la hora de heredar el hermano no cumpliera con el requisito de convivencia exigido por la ley para evitar el pago del impuesto de sucesiones.
De este modo, el hombre tuvo que pagar 305.000 euros en impuestos de sucesiones, aplicados sobre un valor neto de herencia de 700.000 euros, tras una deducción legal de 15.932 euros y un tipo impositivo del 45 %.
Además del imprevisto de tener que hacer frente a un impuesto del que se creía exento, se enfrentó con el problema que no tenía liquidez suficiente para afrontarlo, por lo que se vio obligado a vender el estudio de París que había heredado de su hermana.
Los expertos advierten en el medio sobre la importancia de estar al día con los trámites administrativos y es que un descuido aparentemente inofensivo, como puede ser el cambio de domicilio, puede suponer tener que pagar miles de euros, como ha ocurrido en este caso.